En una campaña altamente competida como la que se espera para 2024 en la entidad poblana, un factor que pesará en gran medida es el saldo que arrojan los gobiernos de los diferentes niveles y de todos los partidos. La elección intermedia de 2021 fue un excelente laboratorio que permitió ver que los ciudadanos están muy pendientes de la actuación de los gobiernos que los representan o dicen representar. Por ejemplo, la pésima administración de Morena en la capital poblana de 2018 a 2021 propició que el partido se fuera a pique en la capital y la zona conurbada. El famoso bono democrático que las autoridades esperaban con ansias para el arranque de sus gestiones para el ensayo y error sin costo político está en extinción. En 2018, la Cuarta Transformación se había levantado con un avasallador triunfo en Puebla y el país. Solo unos meses después, todo cambió. La elección extraordinaria de 2019 fue ganada por Morena gracias a los amarres y la estructura que Miguel Barbosa Huerta logró construir en el interior del estado, pero la ciudad de Puebla y los municipios aledaños se pintaron de azul. Dos años después, el corredor azul era una realidad. Lo efímero del bono ciudadano quedó de manifiesto. Todo esto viene a cuento porque si existe un gobierno que está en el ojo de los ciudadanos y es capaz de provocar un efecto cascada en la percepción estatales (que puede ser tanto negativo como positivo) es el municipio de Puebla. La secretaria de Servicios Públicos del Ayuntamiento de Puebla, María Xóchitl Zárate Tejeda, reveló ayer un dato que no debe pasar desapercibido: La concesión de alumbrado público está muy lejos de cumplir con lo prometido a los ciudadanos. La empresa Traffic Ligth -a la que se le entregó el contrato en medio de una total opacidad- se comprometió a instalar 5 mil 325 luminarias, pero solo lleva mil 979, lo que significa que el rezago es del 63 por ciento. Más aún: El incumplimiento ha llevado a las autoridades municipales a sancionar en cinco ocasiones a la concesionaria. ¿Quién entrega una concesión para estar multando al beneficiario por incumplimientos? Resulta un mal negocio a costillas de los ciudadanos, ¿no? En los sondeos de opinión es común que temas como inseguridad, desempleo y corrupción sean considerados por la ciudadanía como los principales problemas que los aquejan, pero cuando se particulariza al entorno más inmediato del encuestado la realidad aparece: alumbrado (alternativa ante la inseguridad), bacheo, servicios, agua potable, suelen ser identificados como los problemas más graves. La pelea electoral que se avecina no será nada sencilla y los resultados que arroje el Ayuntamiento de Puebla (más allá de los millones de pesos gastados en publicidad disfrazada de propaganda político-electoral) podría ser el ataúd con el que tenga que cargar el Frente Amplio por Puebla. Si, por el contrario, el caso de Traffic Ligth queda como un caso único también tendrá un costo, no tan grave, pero un costo al fin. Lo que se haga o deje de hacer en el municipio más importante será factor clave para el manejo de la percepción. Por desgracia para la Comuna, ya no hay tiempo para corregir todo aquello que se hizo mal, de ahí que la coalición que impulsará el PAN confía en que no haya sorpresas por el punto que, en algún momento, fue su principal fortaleza. Al tiempo.
jueves, mayo 16, 2024
