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sábado, mayo 4, 2024

La familia Rivera, el cacicazgo de Chignahuapan se resquebraja

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La pugna al interior del priismo poblano se trasladó al único bastión con el que cuenta en realidad Eduardo Rivera Pérez, precandidato de Mejor Rumbo para Puebla: Chignahuapan. Y los protagonistas son los integrantes de la familia Rivera, que se ha convertido en el clan caciquil que control los destinos de la región.

El dardo envenenado de la disputa fue lanzado por el presidente de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, Juan Enrique Rivera Reyes, quien responsabilizó al alcalde de Chignahuapan Lorenzo Rivera Nava, de perjudicar la imagen del tricolor debido a los escasos resultados de su gestión.

Diversas circunstancias llevaron al diputado local a renunciar a su partido y aceptar la invitación que le haría el Partido Verde Ecologista de México para regresar a la presidencia municipal de Chignahuapan en 2024. 

“Te podría decir que la actual administración municipal no está dando los resultados que los chignahuapenses estamos esperando, y lo gobierna precisamente el Partido Revolucionario Institucional (PRI), en ese sentido yo sí veo un desgaste considerable, fuerte, por eso estamos considerando competir por otra fuerza política”, dijo. 

Recordó que fue el Partido Verde Ecologista de México el que lo buscó para invitarlo a participar en el proceso interno de selección de candidatos dentro de la coalición Sigamos Haciendo Historia, conformada por el Partido del Trabajo y Morena. 

Desde finales de 2023 reconoció que se había inscrito en el proceso interno de selección de candidatos de Morena a propuesta del Partido Verde, por lo que habría tomado los cursos de formación política del partido obradorista. 

Rivera Reyes también recordó que, en 2014, él fue electo alcalde de Chignahuapan por el Partido Verde y en alianza con el PRI, en una gestión en la que consideró hizo un buen trabajo. 

Asimismo, insistió en que el Partido Verde cuenta con una alta competitividad en la región de Chignahuapan y tiene altas probabilidades de ganar en el municipio. 

El legislador local enfatizó que espera las definiciones que tomen las dirigencias de los partidos de la coalición para tomar una determinación en cuanto a su permanencia en la bancada del PRI, pero en caso de ser favorecido con la candidatura pedirá licencia para separarse de su cargo, así como dejar de pertenecer a la tricolor. 

 

LA FAMILIA RIVERA, CASI 50 AÑOS CONTROLANDO CHIGNAHUAPAN 

Parece poco tiempo, pero la familia Rivera se ha mantenido en el poder de la región de Chignahuapan por casi 50 años, con periodos espaciados de control. En 1975 comenzó su historia de poder con Humberto Rivera Bonilla, el patriarca de la familia, la primera generación de los Rivera, el primer presidente municipal que emanó de la familia Rivera, cobijado por los colores del PRI. 

Para el trienio 1984-1987, casi 10 años después de que llegaron al poder, el siguiente en la presidencia municipal fue Lorenzo Rivera Galindo, quien encabezaría la segunda generación familiar. Pasaron los años y Rivera Galindo logró imponer a su hijo José Lorenzo Rivera Sosa para el periodo 1999-2002, dando inicio a una era en la que difícilmente dejarían el control de Chignahuapan. 

Una vez que Lorenzo Rivera concluyó con su mandato, la familia siguió con su reinado, ya que llegó a la presidencia Raúl Rivera Loizaga, para el periodo 2002-2005. La estafeta en la alcaldía de Chignahuapan la heredó Saúl Rivera Sosa, hermano de Lorenzo Rivera, quien la encabezaría de 2005 a 2008. 

Para el periodo 2008-2011, Lorenzo Rivera Sosa regresaría a la presidencia municipal, mientras que, para la atípica gestión de 2014 al 2018, fue Juan Enrique Rivera Reyes a quien le delegarían el puesto, tras 15 años de control ininterrumpido de la familia Rivera. 

Aunque para la administración 2018-2021 la familia tuvo su pausa al frente del municipio, para la gestión 2021-2024 llegó a la presidencia Lorenzo Rivera Nava, hijo de Lorenzo Rivera Sosa, con lo que la tercera generación heredaría el lugar que han ocupado por décadas. 


Uno de los que más beneficios ha recibido de esa situación es Juan Enrique Rivera Reyes, quien además de ser edil ahora es diputado local, y ha competido en diferentes ocasiones por una diputación federal. 

El otro gran ganador de la familia es Lorenzo Rivera Sosa, pues además de haber sido dos veces alcalde ya fue diputado local y federal, dirigente estatal del PRI, exdelegado de Sedesol y Sedatu, y actual delegado del PRI en Morelos. 

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