Néstor Camarillo Medina, candidato del PRI al Senado, terminó por hundir al candidato de Mejor Rumbo para Puebla, Eduardo Rivera Pérez, al declarar, contrario al panista, que la construcción de la nueva sede del Congreso del Estado es importante y que, como legislador, reconoce que se requiere un nuevo espacio.
Tras las acusaciones del panista, quien se ha lanzado contra el proyecto del que él mismo otorgó los permisos de construcción siendo alcalde de Puebla, Camarillo intentó arreglar el discurso de Rivera, al señalar que lo que él dijo es que la obra es necesaria, pero no prioritaria.
“Yo que tuve la oportunidad de ser diputado local, entiendo perfectamente que la sede sí es necesaria, sí hace falta, pero no es prioritaria, es el mensaje de Lalo Rivera (…) El PRI no se opone a la construcción porque ya está, es un dinero que se está ejerciendo”, apuntó.
El priista afirmó que mientras los hospitales requieren más insumos y las carreteras obras de rehabilitación, existe un proyecto para construir la sede del Congreso. Lo que no dijo es que con anterioridad no se había pronunciado al respecto y Rivera Pérez incluso acudió a la colocación de la primera piedra de la nueva sede junto con el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina, validando así el proyecto.
La diputada sin partido Silvia Tanús Osorio también le jugó las contras a Rivera Pérez, al defender la relevancia de la nueva sede legislativa y señalar que se requiere de un espacio funcional y seguro para el trabajo de los diputados locales: “la política debe construir, no destruir”, afirmó.
En cuanto al estado actual del edificio del Congreso en la avenida 5 Poniente, Tanús Osorio señaló sus limitaciones, como fracturas que podrían representar riesgos para los ocupantes y argumentó que el edificio actual ya no es adecuado para el aforo actual, con lo que respaldó la nueva sede.
“Yo considero que el Congreso debe tener un lugar digno que servirá por muchos años y este se conservará, espero, como un edificio para visitas, para actos protocolarios, no sé para qué lo tengan pensado. Es un edificio muy bello para venir a sesionar, para trabajar diario, pregúntenles a los empleados, ya es muy difícil”, externó.
A pesar de sus críticas, Rivera Pérez no exigió que su partido llame a cuentas a los diputados locales panistas que respaldaron el presupuesto para esta obra. Esto se debe a que, durante la votación del presupuesto, la bancada del PAN en el Congreso local avaló la construcción de la nueva sede legislativa.
Recientemente, Rivera también cayó en otra contradicción, pues señaló que el costo de la nueva sede ascendía a mil millones de pesos, aunque la inversión real fue de 700 millones de pesos. Tampoco mencionó que los diputados panistas que votaron en favor del presupuesto posaron junto a él para la foto en la ceremonia de colocación de la primera piedra del edificio.
Entre los panistas que acudieron a la nueva sede se encontraban Aurora Sierra, Guadalupe Leal, Patricia Valencia, Rafael Micalco, Mónica Rodríguez Della Vecchia, Osvaldo Jiménez y Eduardo Alcántara, mismos que avalaron el presupuesto para el edificio.
Además, durante su gestión como presidente municipal, el gobierno municipal otorgó los permisos necesarios para que iniciara la construcción de la nueva sede del Congreso, lo que ocurrió después de que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH)
liberara los permisos tras la presentación del proyecto al Ayuntamiento.
