A 14 días de la jornada electoral, Claudia Sheinbaum Pardo se enfila hacia el triunfo en las elecciones a la Presidencia de la República tras salir victoriosa de un tercer debate en que su contrincante del PRIAN, Xóchitl Gálvez Ruiz, salió a jugarse sus últimas cartas para ganar algunos votos con ataques y provocaciones hacia la candidata de la coalición Sigamos Haciendo Historia.
Su insistencia en llamarla narcocandidata y narcopartido a Morena, acusaciones de tener el mismo corte de gobierno autoritario que la derecha e incluso señalamientos de un supuesto uso de imágenes religiosas con fines electorales, así como presuntos vínculos con el crimen organizado contra el dirigente de Morena, Mario Delgado Carrillo, fue parte del arsenal que soltó la abanderada panista en su última oportunidad de recortar distancias.
“Las mexicanas y los mexicanos no nos merecemos un debate lleno de calumnias y de mentiras, eso refleja la ausencia de proyecto. No voy a caer en provocaciones. Al debate venimos a presentar propuestas, a defender nuestro proyecto (…) Entiendo la desesperación del PAN, va en un lejos segundo lugar, pero no comparto sus métodos”, dijo al observar la estrategia de la panista para el último careo de los candidatos presidenciables.
La aspirante opositora arremetió de nueva cuenta contra Claudia Sheinbaum por sus supuestos nexos con el narcotráfico y la volvió a llamar narcocandidata —y narcopartido a Morena— por presuntamente recibir donaciones del crimen organizado para la campaña presidencial de Andrés Manuel López Obrador, todo de acuerdo con el libro La Historia Secreta, de la autoría de la periodista Anabel Hernández.
“En el pasado debate llamé narcocandidata a Claudia Sheinbaum y eso generó mucha polémica. Esto no es un apodo ni un insulto, es una descripción de hechos”, dijo la panista que, tras el reto de Claudia Sheinbaum de que presentara su denuncia ante las instancias correspondientes informó que esta querella ya fue presentada.
La aspirante del partido obradorista defendió la estrategia de seguridad del gobierno de México y reprochó la guerra contra el narco que impulsó Felipe Calderón y mencionó a Genaro García Luna, su secretario de Seguridad, condenado en Estados Unidos por narcotráfico, y que mantuvo en su gestión Enrique Peña Nieto.
“Hasta que llegó López Obrador y cambió la política, de declarar la guerra a construir la paz (…) la ciudadanía, por más que digan lo que digan, hoy se siente más segura”, aseveró.
Xóchitl Gálvez no bajó la guardia con sus ataques y acusó a la morenista de utilizar imágenes religiosas para convencer a los ciudadanos de votar por ella, y señaló el hecho de utilizar una falda con la imagen de la Virgen de Guadalupe.
“¿Le contaste a su santidad cómo usaste a la Virgen de Guadalupe en una falda a pesar que no crees en ella ni en Dios? ¿Le platicaste que derrumbaste una iglesia en Tlalpan cuando fuiste alcaldesa? Tienes derecho a no creer en Dios, es un tema personal, a lo que no tienes derecho es a usar la fe de los mexicanos como oportunismo político. Eso se llama hipocresía”, le reprochó.
No obstante, donde todos se vieron sorprendidos por la beligerancia de la oposición fue cuando Xóchitl Gálvez aseguró que Mario Delgado, presidente nacional de Morena, es investigado por autoridades de Estados Unidos por sus presuntos vínculos con el crimen organizado y por el robo de combustible.
La panista lo relacionó con el caso de Sergio Carmona, empresario de Tamaulipas al que se vinculó con tráfico de huachicol en aduanas, y que se le señaló por presuntamente financiar campañas de Morena cuando fue asesinado.
“La revelación que les quiero hacer esta noche es muy grave. Mario Delgado está bajo investigación criminal por agencias de seguridad de Estados Unidos”, expresó la senadora de la República con licencia.
Sin embargo, la morenista no se quedó callada ante la acusación de la panista, y le recordó que la credibilidad del PAN, PRI y PRD ya es nula, pues actualmente tienen más gobernadores prófugos de la justicia o encarcelados enfrentando procesos judiciales que en funciones.
“Estos sí son hechos, el PRIAN tiene más gobernadores y prófugos que en funciones. Estos sí son hechos, lo demás es palabrería”, le reviró Claudia Sheinbaum a Xóchitl Gálvez para proceder con la defensa de sus resultados al frente de la Ciudad de México en materia de seguridad, donde aseguró que se logró bajar la percepción de inseguridad por parte de los ciudadanos.
A su vez, Claudia Sheinbaum destacó que, en el segundo piso de la Cuarta Transformación, lo más importante será continuar con la educación y resaltó que en el actual gobierno se han hecho 200 nuevas universidades Benito Juárez en lugares apartados para tener accesibilidad.
Hizo énfasis en la importancia de la educación pública y gratuita al señalar que 50 mil jóvenes se encuentran cursando estudios en preparatorias cuya construcción impulsó en la Ciudad de México.
Aseveró que durante su gobierno logrará que la economía mexicana se mantenga con la creación de un millón de viviendas, lo que a su vez generará dos millones de empleos.
En cuanto a la política social mencionó que están recuperando los derechos y los están ampliando, 28 millones de familias reciben un programa de bienestar, de manera directa, aumento del salario mínimo, disminuyó la pobreza y la desigualdad, la economía hoy se encuentra mejor, no hay marcha atrás en la transformación.
En materia de agradeció y reconoció a los más de 30 millones de paisanos en Estados Unidos, que envían remesas al país y fortalecen la economía, siempre se les apoyará y defenderá.
Resaltó que se impulsará una política migratoria humanista para lo cual solicitará a Estados Unidos que redirija inversiones en armas hacia el apoyo a necesidades básicas, sugiriendo, además, la reforma del Instituto Nacional de Migración y la Comar.
Asimismo, la morenista sostuvo que se observará los principios constitucionales, específicamente de la no intervención, la soberanía y la paz, se reivindicará la política exterior que sigue el gobierno actual.
