Al pie del zócalo y con la catedral de Puebla como fondo, Alejandro Armenta Mier conquistó simbólicamente el único bastión político de refugio que le quedaba al PRIAN en el estado. La noche del 2 de junio de 2024 marcó el triunfo del obradorismo sobre la ultraderecha poblana.
Desde el mismo punto en el que decidió arrancar con su campaña de 60 días recorriendo la capital y el interior del estado, Alejandro Armenta consolidó un proyecto que comenzó hace 34 años, al ser el presidente municipal más joven de la entidad, y que ahora se materializó con su virtual triunfo por la gubernatura poblana.
Hasta que las encuestas de salida, los primeros datos del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) y el conteo rápido confirmaron lo que en su búnker se sabía desde mediados de la jornada electoral, el morenista se permitió relajar el semblante, romper su estado inmutable y dibujar una sonrisa en su rostro como señal de que llegó al objetivo: la gubernatura de Puebla.
Pero ese fue el único momento en el que dejó de lado su estilo sistemático para analizar todo, pues a partir de este 3 de junio el discurso cambiará de convencer a los ciudadanos de apoyar su proyecto a emprender la gira de la reconciliación de Puebla, de los que respaldaron su proyecto con los que no le dieron su confianza desde un inicio para trabajar por una Puebla sin filias ni fobias.
“Ahora vamos por la reconciliación, sin fobias ni filias, por amor a Puebla, lo único que nos mueve es el amor a Puebla, y con ese amor a Puebla que ustedes nos inspiran en cada uno de los rincones del estado vamos a trabajar con firmeza, con apego a la ley, defendiendo sus derechos, protegiendo sus libertades, trabajando para ser un estado justo para todas y para todos”, externó.
Desde los primeros minutos de la jornada electoral, el candidato a gobernador por los partidos Morena, PT, PVEM, PANAL y FxM se mantuvo sereno ante la trascendencia de la elección de este año y de lo que estaba en juego.
Junto a su familia, su esposa Cecilia, quien ha respaldado en todo momento y que ha encabezado eventos en apoyo a su proyecto y de sus hijos Alex, Cristina y Cecilia, el morenista se formó para emitir su voto, como cualquier ciudadano por más de 30 minutos en los que saludó a los poblanos que se le acercaban para tomarse una foto o simplemente para estrechar su mano.
Los minutos en los que hizo fila su semblante se mantuvo tranquilo, inmutable, cruzaba palabras con su esposa Cecilia o simplemente se quedaba viendo a cualquier otra parte, analizando lo que sigue por hacer en su proyecto, calculando el día a día después de la elección.
Una vez que su voto fue depositado en las urnas, el morenista se enfocó en esperar los resultados de la jornada electoral, aunque las encuestas de salida comenzaban a pintar su triunfo él esperó lo más que pudo para salir a reconocer los resultados de los comicios.
SE LLEVA CARRO COMPLETO
Arropado por todo su equipo de trabajo, integrado por las bases fundadoras de Morena como de quienes abandonaron sus institutos políticos por un proyecto de nación en 2018, Armenta reconoció lo que las tendencias dibujaban un escenario ideal para el obradorismo: carro completo para la coalición y ventaja de dos dígitos en las elecciones de gobernador y presidente municipal de Puebla.
“Los números que tenemos de estudios serios, de encuestas de salida, siempre en respeto a la ley y en respeto al PREP, va a arrojar lo que tenemos todos en los estudiosos de un resultado de más de dos dígitos, tanto en la capital del estado con Pepe Chedraui como en el estado”, manifestó.
Una vez que la brecha en los resultados del PREP se fue separando la fiesta en el zócalo de Puebla fue inevitable para la coalición Sigamos Haciendo Historia que recordó lo ocurrido hace seis años en donde la ola obradorista arrasó y pintó a Puebla de guinda.
A las puertas de la catedral poblana, el cántico de “gobernador” retumbaba en todo el zócalo capitalino por los miles de poblanos que lo esperaron por horas para festejar el triunfo.
Acompañado por su esposa y sus hijas que le cantaron una canción para reconocerlo —que lo conmovió hasta las lágrimas— el morenista le agradeció el apoyo a todos los militantes y simpatizantes de su movimiento.
Recordando las bases de su plan estatal de gobierno 2024-2030, Alejandro Armenta reiteró que su preocupación principal será atender la seguridad, la justicia y el bienestar comunitario de los poblanos para que la riqueza comunitaria sea una realidad para Puebla.
El virtual ganador de la elección a gobernador de Puebla no dejó de lado en su agradecimiento al gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina por su trabajo para mantener vivos los principios de la Cuarta Transformación en el estado.
“Tenemos seis meses para recuperar el ritmo del estado que nos merecemos, desde aquí un gran aplauso al gobernador Sergio Salomón Céspedes porque él redinamizó la economía, la educación, el ritmo que el pueblo necesitaba, no podemos perder ese ritmo, hay que incrementar la velocidad de la acción gubernamental entre los tres órdenes de gobierno, porque eso es lo que Puebla se merece”, enfatizó.
Al pie de la catedral de Puebla, con su nombre escrito en el cielo con drones, Alejandro Armenta vio su proyecto que inició hace 34 años llegar por fin a su destino, un destino que solo es el comienzo de una nueva etapa para su carrera y para Puebla.
