A pesar de que la cifra nacional de casos de extorsiónnincrementó, según reconoció el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, en el estado de Puebla la tendencia es totalmente opuesta.
Desde 2019, tras la llegada del gobernador Miguel Barbosa Huerta al poder, la incidencia de
este delito registró un decremento de hasta 24 por ciento, según se constata en las cifras proporcionadas por la Fiscalía General del Estado (FGE), a través de su apartado incidencia delictiva.
Tan solo el año 2019 cerró con un total de 192 denuncias por extorsión en el estado de
Puebla, no obstante, un año después, es decir, durante el primer año de gobierno de Morena en la entidad, la cifra fue a la baja en 24.5 por ciento, al pasar a 145 carpetas de investigación iniciadas por parte de la Fiscalía.
La incidencia en el delito de extorsión continuó a la baja para 2021, pues de 145 denuncias, la cifra cayó ahora a 117, lo que representó una disminución de 19.3 por ciento.
Este 2022, la tendencia de casos de extorsión se mantiene a la baja, toda vez que mientras en 2021 se cometieron alrededor de 10 casos por mes, en los cinco meses de este año que se tiene registro sobre este ilícito hay nueve casos cada 30 días.
Las denuncias por extorsión, por el contrario, han encendido los focos del gobierno federal a nivel nacional, luego de que comerciantes de mercados en Chilpancingo, Guerrero, fueron atacados por un grupo de hombres armados que irrumpió en una granja distribuidora de pollo y asesinó a tiros a seis personas que se encontraban en el interior, incluido el dueño del sitio y una menor de 14 años, siendo el tercer ataque de este tipo en menos de una semana.
La hipótesis es que estos trabajadores han sido asesinados presuntamente por la banda de “Los ardillos” a fin de que cierren sus negocios para afectar a sus rivales, “Los tlacos”, quienes viven de las extorsiones contra este sector de comerciantes locales.
El tema llamó la atención del mandatario federal, quien reconoció que hay un aumento en el delito en el país en mercados y pequeños comercios.
“Se está atendiendo y es real. Lo que más está creciendo es la extorsión de los delitos que se tienen y estamos trabajando en eso. Dominios de mercados y hay asesinatos por eso. El caso, en efecto, de Chilpancingo tuvo que ver con asesinatos por el cobro de cuotas o moches y estamos viendo eso”, sostuvo.
