A pesar de que, desde hace al menos cuatro meses, vecinos de la zona de la Calzada Zavaleta denunciaron la apertura de los antros “Insomnia” y “British”, cuya operación se extiende a altas horas de la madrugada, los establecimientos continúan laborando de manera normal, aunque la Unidad de Normatividad y Regulación Comercial a cargo de Enrique Guevara Montiel conoció de los hechos por quejas ciudadanas.
En redes sociales comenzaron a circular durante este fin de semana videos en los que se comprueba que dichos afters operan hasta después de las 8 de la mañana, lo que ha provocado molestias entre los vecinos, debido al ruido excesivo y a los desmanes que no son regulados por la autoridad municipal.
No obstante, a decir del alcalde Eduardo Rivera Pérez, la Comuna continuará con operativos para evitar que centros nocturnos operen fuera de la ley, situación que contrasta con la realidad, toda vez que estos y otros establecimientos incluso han sido clausurados en más de una ocasión y posteriormente continúan operando de forma habitual.
“Desafortunadamente la estrategia que utilizan a veces ese tipo de negocios o llega a haber es por el horario, un consumo indebido precisamente de alcohol y luego esto ocasiona varios accidentes, hasta pérdida de vidas humanas”, apuntó.
Rivera Pérez justificó que la cantidad de inspectores que tienen en el municipio no es suficiente para supervisar todos los bares, antros y centros nocturnos que existen en la Angelópolis, por lo que pidió que sean los ciudadanos quienes presenten sus denuncias ante el gobierno municipal.
Según el edil, el área de Normatividad, a cargo de Guevara Montiel, ha realizado 5 mil visitas a establecimientos. De dicha cifra, han ejecutado 700 clausuras y 300 de éstas corresponden a antros.
No obstante, durante cada fin de semana las redes sociales se han inundado de reportes por la falta de sanciones a establecimientos. Un ejemplo fue que durante este fin de semana, la Asociación Civil Real Zavaleta AC expuso que los bares “Insomnia” y “British” cierran alrededor de las 9:00 horas, todos los días de la semana, generando excesivo ruido y molestia a los vecinos.
En el caso del after “Insomnia”, ya ha sido clausurado por lo menos en una ocasión. En noviembre del año pasado, de acuerdo con un comunicado emitido por el Ayuntamiento de Puebla, el establecimiento había sido suspendido temporalmente por incumplir la norma vigente de funcionamiento.
En noviembre del año pasado, más de una decena de jóvenes estudiantes de la BUAP resultaron intoxicados en el salón Country de San Manuel, luego de que la organización Cabrito’s Social Club organizó una fiesta en que se repartió alcohol presuntamente adulterado y de forma indiscriminada a menores de edad.
En su momento, la respuesta del alcalde al escándalo fue dejar a la Secretaría de Salud estatal la responsabilidad de aplicar sanciones, culpar a los padres de familia por no saber “dónde estaban sus hijos” y calificar de “especulaciones” el que se vendiera alcohol adulterado.
