El Ayuntamiento de Puebla, bajo la gestión de Adán Domínguez Sánchez, dejará una bomba financiera a su sucesor, José Chedraui Budib, al haberse gastado 680 millones de pesos que le correspondía ejercer a la administración entrante de Morena, que tomará protesta el próximo 15 de octubre.
Durante la sesión de la Comisión de Patrimonio y Hacienda, Leobardo Rodríguez Juárez, regidor de Morena, calificó los Estados Financieros hasta septiembre como “gravísimos”, pues a pesar de que hay 539 millones de pesos en bancos, las deudas y compromisos financieros superan los 564 millones, lo que significa que al Ayuntamiento no tiene solvencia para pagar completar ni siquiera sus compromisos de pagos con proveedores.
La situación se complica al tomar en cuenta que 70 millones de los fondos totales disponibles en bancos corresponden a retenciones salariales de los trabajadores, es decir, del Impuesto Sobre la Renta (ISR), que deben pagarse a instituciones como el IMSS por el aseguramiento de su base laboral.
Por tanto, el Ayuntamiento de Adán Domínguez, sólo dejará a la siguiente administración 469 millones de pesos en bancos, pero las deudas que deja son mucho más grandes y ascienden a 564 millones de pesos. Esto implica que a la Comuna le faltan 95 millones de pesos para cumplir con sus compromisos de pago, un problema que heredan a la gestión morenista.
Esta situación generó una molestia generalizada, incluso entre regidores del PAN, como su coordinador Carlos Montiel Solana, y otros como Cristian Lucero Guzmán y Leobardo Soto, quienes reconocieron la mala gestión financiera, sumándose a las críticas.
Los estados financieros de septiembre solo pudieron ser aprobados bajo el voto de calidad de la regidora Ana María Jiménez Ortiz, la única que respaldó las cifras de la Comuna.
SE AGANDALLAN 680 MDP
Leobardo Rodríguez Juárez puso en la mesa el problema: la gestión panista, debía dejar 2 mil 089 millones de pesos a la administración de Pepe Chedraui, pero decidieron “comerse” 680 millones de pesos que ya no les correspondía, dejando sólo mil 409 millones de pesos en total, incluyendo pagos de personal y para cubrir toda la operatividad básica de una ciudad de 1.6 millones de habitantes.
“Esta administración termina el 14 de octubre, el Ayuntamiento tenía que gastarse solamente los ingresos devengados a esa fecha y a partir del 15 de octubre al 31 de diciembre la nueva administración debía recibir 2 mil 089 millones de pesos, pero usted ya determinó (el tesorero) que no, que la siguiente administración con mil 409 millones sale y no pasa nada, pero sí pasa, porque el dinero que queda a partir del 15 de octubre es facultad del nuevo Ayuntamiento”, espetó.
El morenista entró más de fondo en el problema. Declaró a Hipócrita Lector que el derroche de recursos fue visible a todas luces, con 2 mil 600 millones de pesos ejercidos tan sólo en el último trimestre, ejemplo de la mala planeación para administrar los recursos.
❌ @PueblaAyto con mala administración probablemente de $680 Millones de pesos.
La administración de @eduardorivera01 y el presidente sustituto @adandominguez pretenden hacer su mini FOBAPROA para la Ciudad de Puebla. Recibieron un municipio libre de deudas, gastaron millones… pic.twitter.com/o09UWxeZ2t
— Regidora Elisa Molina (@ElisaMRegidora) October 7, 2024
RECONOCEN FINANZAS COMPLICADAS
Al respecto, el tesorero municipal, Omar Coyopol, reconoció que el gobierno saliente deja finanzas complicadas, pero justificó que la nueva administración contará con 839 millones de pesos en ingresos fiscales y participaciones para hacer frente a los compromisos del último trimestre de 2024.
“Vamos a dejar algunos pasivos (deuda) sí, pero están canalizados en beneficio del municipio, principalmente en obras y en seguridad pública que son el porcentaje más alto. (El adeudo) puede incrementar o puede disminuir, porque la operación de la tesorería es continua”, justificó.
Sin embargo, su declaración solo empeoró la situación, ya que Rodríguez Juárez señaló que no hay certeza sobre los recursos que recibirá el próximo Ayuntamiento, como los provenientes de la recaudación anticipada del predial. Además, manifestó que la administración municipal actual debió respetar los fondos que ya no le correspondía gestionar.
“Lo que pretenden es decirle a la administración es ‘ya lo debemos, ahí paguen y ustedes no compren, porque ya nos lo gastamos’. Esperamos conocer cuál es la estrategia para darle viabilidad a la operación de la ciudad y salga a explicarle a los proveedores quién va a pagar, si no hay dinero. Ni Luis Paredes, que fue el peor presidente municipal en la historia reciente, dejó una situación de esta naturaleza”, manifestó.
CAUSA INDEFENDIBLE
Otros regidores, que habían sido aliados de Adán Domínguez y Eduardo Rivera, se sumaron a la ola de críticas. “Es un error”, manifestó Cristian Lucero Guzmán del PRI, quien dijo que la Tesorería debió haber sido más responsable en la gestión del erario, mientras que Leobardo Soto, de la misma fuerza política, expuso que sólo en un mes la Comuna gastó el 20 por ciento del presupuesto anual.
El coordinador de regidores, Carlos Montiel Solana, optó por tomar una postura más indulgente, al asegurar que no se trata de un “hoyo financiero”, pero reconoció que “no fue correcto”, gastar los recursos que le competen a la siguiente administración.
“La transparencia está ahí al reconocer los pasivos que hoy tenemos, no nos gusta, hay que decirlo, coincido con lo expresado con el regidor Leobardo, hay una falta de control y se tendrá que investigar y atender a quiénes son los responsables (…) Debimos tener la cortesía de haber dejado mucho más para la operación de la siguiente administración”, apuntó.
Ricardo Grau, también del PAN, se dijo “preocupado” por la situación financiera del municipio y cuestionó si en verdad hay “finanzas sanas”, mientras que en sus redes sociales no dudó en expresar: “se trata de ser aliados, no cómplices”.
