Bajo un nuevo formato que permitió una mayor interacción entre los participantes, los tres candidatos al gobierno del estado se enfrentaron en el primer y único debate organizado por el Instituto Electoral del Estado (IEE), centrándose la atención en el morenista Alejandro Armenta, quien mostró autocontrol y un claro desenvolvimiento en sus intervenciones, así como en el candidato del PRIAN, Eduardo Rivera, quien aprovechó para mayormente golpetear a su oponente teniendo tiempos muertos en sus intervenciones y titubeos.
Aunque el ejercicio se organizó para que los candidatos expusieran sus propuestas en tres ejes temáticos, los ataques, acusaciones y señalamientos entre los dos punteros, con el remate del tercero, dieron al encuentro el toque de una enfrascada guerra electoral que concluirá en tres semanas.
Tópicos como la privatización del agua y del alumbrado en el municipio de Puebla, desvío de recursos del ayuntamiento, así como los vínculos con la delincuencia mediante los candidatos postulados por la coalición Mejor Rumbo Puebla, persiguieron al panista Eduardo Rivera al escenario del debate.
Y aunque este intentó traer a colación el supuesto atentado en su contra, que realmente se trató de un asalto del cual fueron víctimas dos de sus vecinas en el fraccionamiento donde vive, fue un episodio que en minutos quedó en el olvido, pues los otros candidatos hicieron mella.
Pero el panista también aprovechó para realizar ataques en cada una de sus interpretaciones, centrándose en Alejandro Armenta -quien antes del debate le aventajaba 26 puntos en las encuestas- cuestionando su pasado marinista y su relación con “El Grillo”.
Durante poco más de una hora que duró el evento, los candidatos a la gubernatura se lanzaron preguntas, Alejandro Armenta respondió a cada una de las que le lanzó el prianista, sin embargo quedaron pendientes varias interrogantes hechas al exedil de la capital como el gasto de 7 mil millones de pesos para promocionar su imagen.
Con este nuevo formato, el cual fue avalado por todos los partidos políticos, los aspirantes tuvieron la oportunidad de exponer en cuatro minutos sus propuestas en torno a cada eje, posteriormente, sus oponentes, realizaron una réplica dos minutos y finalmente, se permitió una contrarréplica del aspirante en turno, lo que generó una mayor interacción.
Durante sus intervenciones, Alejandro Armenta mostró un mayor autocontrol de sus tiempos, pues el morenista no dejó perder un solo segundo y sus intervenciones concluían en el segundo exacto que se detenía el cronómetro; mientras que Eduardo Rivera dejó perder varios segundos concluyendo anticipadamente sus intervenciones o en algunos casos le faltó tiempo para concluir una idea.
Al término del encuentro Alejandro Armenta y Eduardo Rivera de proclamaron ganadores de este encuentro.
