🧸 LOS SERVICIOS DE INTELIGENCIA de la Ciudad de México reportaron sorprendidos un hecho insólito, inusual, descabellado. La alcaldesa de Cuauhtémoc, Sandra Cuevas, tenía un personaje llamado Daniel —‘Danielito’— en su nómina oficial. Lo que generó alarmas rojas en esta trama es que el susodicho ¡era un pequeño oso de peluche de color arena!
🐻 DANIELITO TENÍA NIÑERA, carreola, escolta, dieta especial, habitación propia —en su casa de Santa María la Ribera—, vehículo permanente —blindado, con chofer-guarura—, sala de televisión, y un surtido de lujos inimaginable. Cualquier capricho de Danielito —transmitido en directo a la alcaldesa— era cubierto por el staff de la Cuauhtémoc.
💋 PARA QUE DANIELITO NO SE ABURRIERA, una guapa y joven niñera lo atendía casi las 24 horas del día. Ella le cambiaba el vestuario según la temporada. En invierno, le ponía un pijama alusivo a Santa Claus. En enero, ropa para esquiar. En verano, traje de baño. Y así hasta la náusea. En ocasiones, Sandra Cuevas mandaba por él después de una junta con su equipo. Y entonces lo presumía en medio de la algarabía y cariñitos de sus colaboradores. ¡Ay de aquél que no celebrara a Danielito!: corría el riesgo de ser despedido fulminantemente.
👁️ 👁️ CÓMO OLVIDAR A SANDRA CUEVAS. Desde su alto cargo intentó implementar un corredor tecnológico y cultural sobre la calle de Génova, en la Zona Rosa: un corredor inspirado en el Fremont Street Experience, de las Vegas. Muchos empezaron a dudar de su salud mental. No estaban equivocados. La novia del impresentable Adán Ruvalcaba —hoy, director del Metro— presentaba un cuadro preocupante en ese tema. Lo de Danielito sólo vino a confirmar que nuestra heroína había sido abducida por algún alienígena a sus 35 años de edad.
👽👽👽 HOY, SANDRA CUEVAS tiene una fortuna brutal e inexplicable. Y se mueve en todos lados —siempre al lado de Danielito— como parte de su agitada vida de influencer y celebridad. Es, jura, una empresaria muy éxitosa, aunque nadie conoce sus empresas. Ella y Danielito son dos enigmas poderosos en este planeta cada vez más poblado de Annunakis (hijos de Anu): seres extraterrestres que vinieron a la tierra hace miles de años para extraer oro. Una chispita de sabiduría: los Annunakis fueron —oh, sí— los creadores de la humanidad. Ufff. Está dicho: la marihuana no mata, sólo apendeja.
