Luego de que el gobierno del estado cumplió con la instalación de siete clínicas para que mujeres poblanas puedan realizar la interrupción del embarazo mediante un procedimiento seguro, el gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, aseguró que destinarán el presupuesto suficiente para que estas puedan operar.
El mandatario sostuvo que el Ejecutivo cumplió con la sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) tras un amparo en materia de autonomía reproductiva y objeción de conciencia.
Manifestó que en lo que respecta al Congreso del estado, serán los legisladores los que decidan si la despenalización del aborto será aprobada, por lo que desde el gobierno del estado habrá únicamente una vigilancia del tema, al no estar dentro de su competencia.
A partir del martes 5 de diciembre, se implementó un significativo cambio en el acceso a los servicios de interrupción del embarazo en el estado de Puebla. En siete hospitales públicos, las mujeres podrán ejercer este derecho antes de las 12 semanas de gestación, amparadas por un nuevo esquema legal.
La iniciativa, resultado de un amparo contra la criminalización del aborto en el estado, brinda a las mujeres la posibilidad de tomar decisiones informadas y respaldadas. Aquellas que elijan interrumpir su embarazo contarán con el apoyo y asesoramiento de colectivas feministas prominentes, incluyendo el Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), el Observatorio Ciudadano de Derechos Sexuales y Reproductivos (Odesyr), y el Centro de Análisis, Formación e Iniciativa Social (CAFIS).
Estas siete unidades medidas están ubicadas en el Hospital de la Mujer, los hospitales del ISSSTE en Tehuacán, Teziutlán y Huauchinango, así como en el Hospital General de Zona 20 del IMSS, mejor conocida como La Margarita y el Hospital General Zona 35 de Cuautlancingo.
