El Partido Revolucionario Institucional (PRI) cayó en las viejas prácticas que dicen que dejaron atrás, al entregar las candidaturas a presidentes municipales a viejos cacicazgos regionales para perpetuarse en el poder.
La Comisión Nacional de Procesos Internos del PRI avaló las primeras 98 candidaturas a presidencias municipales de las 201 que designarán en el estado de Puebla para este proceso electoral 2023-2024.
Sin embargo, dentro de estas definiciones, familias como los Valencia Ávila, los Vergara Tapia y los Rivera Sosa salieron beneficiadas al tener una oportunidad más de perpetuarse en el poder como lo han hecho por décadas en sus respectivas regiones.
El caso más destacado es el de Adrián Trujillo Tobías, secretario particular del presidente del Comité Directivo Estatal del PRI y diputado local, Néstor Camarillo Medina, a quien le fue concedida la candidatura a la presidencia municipal de Quecholac.
Adrián Trujillo, quién formó parte del gobierno de Néstor Camarillo en Quecholac de 2014 a 2018, como director de Desarrollo Social, formo parte del reciente escándalo, tricolor de la presunta red de venta de candidaturas en la elección de 2021.
De acuerdo con varias columnas periodísticas, Adrián Trujillo habría sido el encargado de cobrar alrededor de 15 mil pesos a los aspirantes a candidaturas en el proceso electoral 2020-2021, para recibir “cursos” para dicha elección.
Por esta presunta red de venta de candidaturas, encabezada por el dirigente estatal del partido, habrían recaudado alrededor de 26 millones de pesos, los cuales no fueron a dar a las arcas del partido.
Entre los cacicazgos destacados se encuentra la familia Rivera, en la región de Chignahuapan, que se ha apoderado de la presidencia municipal este municipio desde hace 50 años.
Para este proceso electoral le darán una nueva oportunidad de gobernar a Lorenzo Rivera Sosa, exdelegado de Sedesol en el estado durante la administración de Enrique Peña Nieto, además de que ya fue presidente municipal en dos ocasiones, en los periodos 1999 a 2002 y de 2008 a 2011.
Se espera que se enfrente a su sobrino Juan Enrique Rivera Reyes, quien busca la candidatura por el Partido Verde Ecologista de México, en la coalición Seguiremos Haciendo Historia en Puebla, y que en semanas pasadas arremetió en contra de la actual gestión encabezada por su primo, Lorenzo Rivera Nava.
En cuanto al actual edil de Chignahuapan, no se quedará fuera de las candidaturas para esta elección, ya que la dirigencia priista aprobó el registro de Lorenzo Rivera Nava como candidato a diputado local de la coalición Mejor Rumbo para Puebla.
Otro de los ejemplos más evidentes de cacicazgos perpetuados en el poder por el PRI es el de la familia Valencia Ávila, un cacicazgo acechado por la sombra del crimen organizado y hasta el homicidio que cedió el poder en Venustiano Carranza.
La familia Valencia Ávila, integrada por —Marco Antonio, Rafael, Alejandra, Vicente y Patricia— gobernó el municipio por 11 años y medio ininterrumpidos, además de que se hizo de una diputación local en la actual legislatura. Para ello, tuvieron que sacar sus dotes camaleónicos pues tras ser arropados por el PRI, en la década de los 2010, se unieron al PAN liderado por el morenovallismo.
Para esta elección, Patricia Valencia rompió con el PAN en el Congreso del Estado para declararse diputada sin partido, aunque se espera que sea sumada por Morena a una candidatura.
En tanto, su hermano Marco Antonio Valencia, quien ya fue presidente municipal de Venustiano Carranza, fue recompensado con una nueva oportunidad para gobernar esta región para el periodo 2024-2027.
En el caso de la familia Vergara Tapia, en el municipio de Petlalcingo, donde el fallecido edil priista Filadelfio Vergara Tapia fue sucedido por su hermana, Isabel Vergara Tapia, demarcación que han gobernado por 15 años.
Para esta elección, el tricolor le dio la oportunidad a Isabel Vergara de reelegirse para un periodo completo de gobierno ya que asumió la presidencia municipal como sustituta en mayo de 2022.
En el municipio de Libres, donde la familia Rodríguez Vergara se ha perpetuado en el poder, la historia se busca repetir de la mano del PRI.
Francisco Javier Rodríguez Rivero, esposo de la secretaria general del Comité Directivo Estatal del tricolor, Delfina Pozos Vergara, fue designado como candidato a la presidencia municipal de Libres, la cual ya ocupó en tres ocasiones y la última vez que estuvo al frente fue en el periodo 2018-2021.
Asimismo, en la región de Zacatlán, el priismo le concedió la candidatura a Jaqueline Lastiri Barrios, prima del exdelegado de Sedatu, Juan Carlos Lastiri Quirós, quién fue señalado por presuntamente participar en la “Estafa Maestra” en Sedesol, a cargo de la entonces secretaria Rosario Robles Berlanga.