Ethan Hawke (Texas, 54 años) no para de trabajar. A principios de junio se estrenó la película She Dances, en la que es uno de los protagonistas, y a finales de octubre llegará a los cines estadounidenses Blue Moon, donde da vida al personaje principal, un compositor que lucha contra el alcoholismo y los problemas de salud mental.
“Tuve que darlo todo. Esa película me exigió todo. No salí al mundo durante un par de meses. Simplemente desaparecí”, ha explicado sobre el papel en una entrevista con la edición británica de GQ publicada este lunes. Ha reaparecido para la promoción de la película, pero además de conversar sobre sus proyectos presentes y futuros (ha participado, por lo menos, en otros cinco que se estrenarán próximamente), no ha podido evitar que se le pregunte por su pasado. Y en su pasado hay un nombre que se repite siempre: Uma Thurman.
Hawke recordó ese momento como un punto de inflexión que lo llevó por un camino más artístico y menos comercial. Aunque ya protagonizaba películas destacadas como Dead Poets Society y Before Sunrise, reconoce que Titanic catapultó a Leonardo DiCaprio a un nivel de fama que él prefería evitar.
En la misma entrevista, Hawke hizo referencia a su pasado con Uma Thurman, esposa de 1998 a 2005, calificando la atención mediática que rodeó su separación como “humillante” incluso en los casos donde los comentarios eran positivos.
Además, la conversación sirvió para enaltecer la trayectoria coherente de Ethan Hawke: una carrera cimentada en el cine independiente, el teatro y la escritura, con cuatro nominaciones al Oscar, lejos del modelaje clásico de estrella hollywoodense.