Ignacio Juárez/Mario Alberto Mejía
(Segunda de tres partes)
Además de ser el responsable de la intrincada estrategia jurídica para desfalcar a la Fundación Mary Street Jenkins, que le permitió quedarse con el 15 por ciento de los activos -valuados en más de 2 mil 200 millones de dólares-, el abogado Virgilio Rincón Salas creó una estructura empresarial para beneficiarse de cada paso establecido en la ruta para extraer el dinero de la institución poblana y, además, saquear las arcas de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap).
Para lograrlo, el abogado contó con la anuencia de la familia Jenkins de Landa, así como de la participación del exrector Luis Ernesto Derbez y su socio Alejandro Hernández Muñoz, quienes crearon sociedades comerciales y civiles a las semanas o meses de que se desfondara de recursos a la Fundación Jenkins.
Rincón y sus cómplices, por ejemplo, ofrecieron el servicio de administración de los 18 inmuebles que eran parte del patrimonio de la fundación poblana y que fueron transferidos a la Fundación Bienestar de Filantropía.
Una vez que dicha fundación cambió su sede al paraíso fiscal de Barbados, entonces, ofrecieron los servicios de “terciarización de personal”, es decir, fungieron como outsourcing.
Pero el caso más escandaloso fue la estructura empresarial hallada por un grupo de 20 auditores contratado por el nuevo patronato de la Fundación Udlap, encabezada por Horacio Magaña, y que le permitió a Rincón Salas y sus secuaces saquear a la Udlap hasta por 200 millones de pesos.
La estrategia incluyó la triangulación de los recursos de la casa de estudios a través de 16 empresas, algunas calificadas como factureras e investigadas por el Sistema de Administración Tributaria.
Ante esa situación, el nuevo patronato presentó seis denuncias penales (cuatro locales y dos federales) por seis delitos: Operaciones de recursos de procedencia ilícita, lavado de dinero, fraude específico, administración fraudulenta, desvío de recursos y delincuencia organizada.
El 16 de agosto de 2021, el Juez de Oralidad concedió órdenes de aprehensión contra Virgilio Rincón Salas, Luis Ernesto Derbez y demás involucrados.
Negocio redondo
De acuerdo con el contrato signado entre Virgilio Rincón y Guillermo Jenkins Anstead (EPD), entonces presidente de la Fundación Jenkins, el abogado fue el encargado de
“diseñar e implementar los mecanismos legales necesarios” para que la familia Jenkins de Landa se quedara con el patrimonio de la institución, valuado en 730 millones de dólares, y resguardarlo en paraísos fiscales.
Por esas y otras acciones, Rincón Salas recibió el 15 por ciento de los activos de la fundación, equivalente a 110 millones de dólares, es decir, más de 2 mil millones de pesos en conversión actual.
Pero no fue la única ganancia que obtuvo. También se benefició con la creación de empresas paralelas que acompañaron la ruta jurídica para sacar los 730 millones de dólares de la fundación del país.
Una de esas empresas fue Consultoría en Administración de Centros Deportivos y Comerciales, creada en mayo de 2015, unos meses después de que se creó la Fundación Bienestar de Filantropía, la primera instancia a la que se envío el patrimonio de la Fundación Jenkins.
La existencia de la empresa paralela fue dada a conocer en 2017 por el periódico Reforma y el semanario Proceso y causó un revuelo debido a que era la primera ocasión en que se conocía que había una participación directa entre Luis Ernesto Derbez y los abogados de la familia Jenkins.
Ante el escándalo, el entonces rector de la Udlap no tuvo opción más que reconocer la participación de Virgilio Rincón y Alejandro González Muñoz. La encomienda, dijo, era administrar los 18 bienes inmuebles que eran propiedad de la Fundación Mary Street Jenkins y ahora se encontraban en poder de Bienestar de Filantropía, entre los que se encontraban los clubes deportivos Alpha, las diferentes escuelas del Colegio Americano y un edificio ubicado en Paseo de la Reforma 180, en la Ciudad de México.
Consultoría en Administración nació antes de que Bienestar de Filantropía cambiara su sede al paraíso fiscal de Barbados, pero continuó ofreciendo los servicios tras la mudanza.
A decir de Guillermo Jenkins de Landa, el único del clan que se opuso al cambio de estatutos de la fundación para quedarse con el dinero del patriarca William O. Jenkins, la nueva empresa era necesaria porque se requería de una sociedad con domicilio en México que se pudieran pudiera “cobrar las rentas y, en general, administrar todos los inmuebles que fraudulenta e ilegalmente recibió de la Fundación Mary Street Jenkins”.
Así operó la empresa hasta noviembre de 2015 cuando fue creada la empresa Inmobiliaria FBF que asumió la administración de los 18 inmuebles, aunque eso no significó que Rincón y Derbez quedaran fuera del negocio.
El 7 de julio de 2017, Luis Ernesto Derbez concedió una reveladora entrevista a Proceso en la que sostuvo:
“Se crea otra inmobiliaria, en la que yo no participo, y es la que está ahora administrando. Nosotros estamos simplemente supervisando y como empresa estamos haciendo lo que yo llamaría la terciarización de personal.”
“¿La otra empresa que se creó es la que administra?
“Sí. Nuestra empresa presta servicios de personal a partir del 25 de noviembre de 2015”.
Este último dato no es casual y explica todos los movimientos de esa fecha, ya que es justo cuando Virgilio Rincón y Alejandro Hernández, representantes legales de la familia Jenkins y patronos de Bienestar de Filantropía, comenzaron la última fase de la ruta jurídica para desfalcar a la Fundación Jenkins.
En esa fecha, en Panamá, se crea la Fundación para el Desarrollo Latinoamericano que recibe todo el patrimonio de Bienestar de Filantropía. Eso movimiento significó, además, un cambio radical en el objeto de la institución al convertirse en una fundación “interés privado”, siendo los únicos beneficiarios los integrantes de la familia Jenkins de Landa.
Y ahora contra la Udlap
A la par de los servicios de “terciarización de personal” que Virgilio Rincón y Derbez Bautista ofrecían a los Jenkins de Landa, el 18 de enero de 2016 crearon una nueva sociedad: Udlap Jenkins Graduate School. El objetivo ahora era hacer negocios a costa de la universidad cholulteca.
La diferencia sustancial fue que en la nueva sociedad se integraron los vicerrrectores de Administración, Mónica Ruiz Herrera; de Finanzas y Desarrollo Institucional, Mario Vallejo; y el director jurídico, Jesús Salvador Mijangos Patiño.
Dicha sociedad surgió de la participación de las autoridades universitarias y la fusión de las sociedades Consultoría en Instituciones de Educación Superior y Asesoría en Dirección de Instituciones Educativas, que representaban los abogados ahora investigados por la presunta defraudación a la Fundación Jenkins.
La constitución fue realizada en la ciudad de San Andrés Cholula el 18 de enero de 2016, en la Notaría Pública número Dos en Cholula.
El 6 de julio de 2021, Derbez Bautista reconoció la existencia de la sociedad y a regañadientes aceptó que los abogados de la familia Jenkins eran sus socios y ofrecían servicios de posgrado a la Udlap en sus propias instalaciones, pues contaban con un comodato para su uso.
El otro saqueo
Udlap Jenkins Graduate School fue solo la punta de la madeja que sacó a flote una estructura empresarial para hacerse de los recursos de la Udlap.
Todo comenzó el 29 de junio de 2021, cuando el nuevo patronato de la Fudlap asumió el control de la institución. En redes sociales circularon videos donde aparecen empleados de la universidad huyendo despavoridos y cargando pesadas cajas repletas de documentos y discos duros de computadora.
Otros empleados más realizaron la extracción de los materiales en diablitos.
Todos reflejaban rostros de preocupación.
Y no era para menos.
Dos meses después, los poblanos nos enteraríamos la causa de su congoja.
Luego de ocho semanas de auditorías y revisión de las condiciones administrativas y financieras con que operaba la Udlap se halló un tinglado de 16 empresas utilizado para triangular la salida de más de 200 millones de pesos de la institución a los bolsillos de Virgilio Rincón, el exrector Luis Ernesto Derbez, los vicerrectores Mónica Ruiz y Mario Vallejo; Jesús Mijangos, los integrantes de la familia Jenkins de Landa y Virgilio Rincón Salas.
En una entrevista que Rodrigo Gurza Cárdenas, representante legal del nuevo patronato de la Fudlap, concedió a estos reporteros el pasado 20 de agosto de 2021, reveló: “Es todo un esquema de triangulación de empresas de dinero. Mandaban el dinero a las empresas para que, a su vez, lo mandaran a las cuentas de ellos o cuentas de terceros relacionados con ellos para simular los pagos y no hay productos entregables que justificaran los pagos realizados para universidad”.
Había, agregó, “una estructura, beneficiarios, autores intelectuales, materiales, hay una organización de qué iba a hacer cada uno, cómo se iban a colocar, cuánto iban a ganar, por eso hay delincuencia organizada”.
Y al frente de todo ese esquema estaba Virgilio Rincón Salas.
“Ya se habían robado el dinero de la Fundación Mary Street Jenkins y comenzaron a saquear a la Universidad de las Américas Puebla”, asentó en esa ocasión el representante legal.
El asunto llegó a tal extremo que entre la documentación se encontró que el administrador de una de las empresas fachada era un carpintero que recibió 6 millones de pesos por un análisis de la Ley del IMSS de acuerdo con un nuevo criterio aplicado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación. “El producto entregable no existe y si existiera cómo es posible que lo pueda a hacer un carpintero”, relató.
El abogado abundó que Virgilio Rincón, Derbez y sus cómplices usaban una base de ocho empresas e involucraban a más compañías en las que los accionistas son ellos mismos.
RECURSOS
Tinglado para saquear a la Udlap
Everomex Solutions (identificada por el SAT como facturera)
Barumen Sistem SA de CV
Servicios y Asesorías Tismic SA de CV
Goldbleum SA de CV
Servicios Profesionales Hildenber
Udlap Jenkins Graduate School
Cronos SA de CV
Consultoría en Administración de Centros Deportivos y Comerciales
Consultoría en Instituciones de Educación Superior
Asesoría en Dirección de Instituciones Educativas
Reforma Bicentenario
