El derroche de los funcionarios de Eduardo Rivera Pérez, presidente municipal de Puebla, que incluyen gastos como 3.9 millones de pesos en refrescos, café y galletas para reuniones y 38.9 millones en gasolina, tendrá que justificarse, señaló el gobernador Miguel Barbosa Huerta.
Ante la deuda que acumula el SOAPAP y el costo operativo de llegar a concretarse la remunicipalización del servicio de agua potable en la capital, situación que según el alcalde panista ahorcaría las finanzas municipales, el gobernador ironizó que no le alcanzaría para pagar medio día ni dos horas del suministro de agua.
La administración municipal reportó gastos en desmedida durante el primer cuatrimestre de 2022 como la compra de insumos para las reuniones de los funcionarios, entre los cuales se encuentran galletas, refrescos y botanas; así como la compra de vasos, cubiertos y jarras de vidrio, una azucarera y cafetera eléctrica, por 3 millones 962 mil 264 pesos.
A ello se suma el gasto en combustible por 38 millones 952 mil 720 pesos, lo que genera un gasto promedio de 324 mil pesos diarios, y 19.3 millones de pesos para el pago de cerrajería en cuatro meses.
Al respecto, el mandatario señaló que todos estos gastos tendrán que ser justificados, aunque en tono irónico se refirió a la compra de botanas para las reuniones, en las cuales se gastan alrededor de 33 mil pesos por día: “de aquí le mandamos al ayuntamiento si quiere unas galletas Marías”, añadió.