Lo que sería un día más de trabajo para Carlos, alias El Kiko, se tornó en una pesadilla, cuando un domingo familiar lo convirtió en una tragedia. Ese día por la mañana, tomó las llaves de su camión para salir a trabajar y cubrir la cuenta del día, el alcohol se atravesó en su jornada hasta terminar con su unidad estrellado en la pared de una casa de empeño, en la colonia Campestre Mayorazgo.
Desde ese día, Carlos N., de 31 años de edad, no regresó a su casa con su familia, a la cual dejará de ver al menos durante dos meses que dure la etapa de investigación complementaria, pues este miércoles recibió el auto de vinculación a proceso por los delitos de lesiones a título de culpa agravado y daños en propiedad ajena.
Al estar alcoholizado en tercer grado, el conductor ocasionó un accidente que dejó diez lesionados, entre ellos un menor de dos años en estado grave y una niña de seis años con quemaduras en el cuerpo, con quienes el concesionario -según denunciaron familiares de las víctimas- no ha cumplido su obligación de apoyar.
Cuando menos lo esperaban las víctimas, llegó un anuncio para hacerles justicia. El gobernador Miguel Barbosa Huerta instruyó a que no solo se revisara la concesión del permisionario en cuestión, sino de todas las que tiene la ruta 45-A.
Si es necesario se procederá a cancelar las concesiones: “Si no cumple con sus responsabilidades se anula la concesión, le voy a pedir a la secretaria (de Movilidad y Transporte, Elsa Bracamonte) que analice las concesiones de toda la ruta, donde está el concesionario que no quiere responder”, advirtió el mandatario en su conferencia matutina.
Miguel Barbosa dijo que el permisionario de la unidad que manejaba Carlos N. no puede justificarse con emprender acciones legales para zafarse del delito que cometió con la unidad a su cargo, por lo que se emprenderá la revisión a toda la ruta y, de encontrar irregularidades, será cancelada.
“Vamos a empezar a aplicar la autoridad contra esos gremios insensibles”, fue la advertencia que lanzó el mandatario en su conferencia matutina de este miércoles, mientras que por la tarde concluyó la audiencia en la que Carlos N. fue vinculado a proceso.
A solicitud del Ministerio Público de la Fiscalía General del Estado (FGE), el juez otorgó como medida cautelar la prisión preventiva oficiosa en contra del imputado, por lo que fue enviado al penal de San Miguel, en donde deberá esperar a que se desahogue el proceso en su contra.
A las 17:00 horas del domingo 19 de junio, Carlos N. provocó un choque a la altura del mercado Independencia, al sur de la capital poblana. El grado de alcoholismo en la sangre hizo que se pasara la luz roja del semáforo e impactó a un vehículo Volkswagen Polo color negro, en el cual viajaba una familia.
El vehículo fue lanzado contra un puesto de churros y papas, el aceite quemó a una menor de edad. La unidad de Carlos N. fue a estamparse contra la pared de una casa de empeño.
Algunos testigos pasaron a ser auxiliares de los paramédicos de Protección Civil y SUMA que atendieron el accidente, ayudaron a brindar atención a los primeros heridos que salieron del autobús y a tranquilizar a otras personas que entraron en crisis nerviosa.
