En los primeros cinco meses de su gestión, el gobernador Alejandro Armenta presumió una serie de logros centrados en el trabajo comunitario y el campo poblano. Según declaró, su administración está impulsando la participación ciudadana y ejecutado mil 200 obras de carácter social, además de organizar 17 jornadas comunitarias.
Uno de los ejes, explicó, es el desarrollo rural. Para ello, anunció la asignación de mil millones de pesos destinados a mejorar las cadenas productivas del campo, sin intermediarios y con transparencia, a fin de mejorar la producción agrícola desde las comunidades.
En materia de seguridad, el mandatario aseguró que los indicadores delictivos han mostrado una tendencia a la baja, resultado de un enfoque que prioriza la atención a las causas y el trabajo conjunto con la población.
Como parte de este enfoque, Armenta detalló que se descentralizó el DIF estatal para tener mayor presencia en los municipios y facilitar la coordinación con delegados en temas de bienestar y productividad. También recordó que recientemente se otorgaron apoyos a campesinos de Chiautzingo afectados por fenómenos naturales.
Por otro lado, el mandatario anunció el programa “ni milpa ni moches” para combatir la corrupción, lo cual impedirá a candidatos conocer el salario que obtendrían de ganar la contienda.
“Lo estamos diseñando para que se pueda sacudir a la corrupción como se merecen los poblanos y que nunca más un candidato a gobernador, presidente, piense cuánto les va a dejar la presidencia. Nos comprometimos a servir al pueblo, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue muy claro en su momento: es muy fácil servir, si se ama al pueblo, se sirve bien”, manifestó.
