Llevas una vida dando vuelta a la derecha, en la esquina que sale a tu ruta diaria. Alguna vez dijeron que en el futuro esa vuelta se cancelaría y que tendrías que ir hasta la rotonda para girar. Un año después, viene lo inevitable: ya no se puede dar vuelta a la derecha y tienes que ir más abajo y tomar la rotonda para regresar. En caso de ser sorprendido dando la vuelta, se te aplicará una multa fuerte. La sorpresa viene cuando esa multa te la aplican porque las cámaras de la ciudad captaron el momento en que dabas la vuelta, UN AÑO ANTES DE QUE SALIERA LA NUEVA DISPOSICIÓN. El nuevo reglamento te lo hacen retroactivo, mucho tiempo antes que saliera el nuevo reglamento. Tú sabías que algún día iba a salir porque la circulación se estaba haciendo lenta por los coches que daban esa vuelta a la derecha, pero la sorpresa fue cuando te llegó la multa por las veces pasadas que lo hiciste e imposible decirle, ante esa justificación que dan las cámaras, que tú no eres el que saca esa cámara.
De esa forma le quieren quitar al Club León su derecho de participar en el campeonato mundial de equipos, a jugarse en EE. UU. a mediados de este año. El León gana su derecho en la cancha en el 2023 y el nuevo reglamento de que no pueden acceder al torneo, equipos que pertenecen al mismo dueño, sale en el 2024.
Independientemente que en las leyes no te pueden juzgar por un acto pasado no estipulado en su momento, lo patético y lamentable es que alguien movió ese reglamento, por conveniencia, por venganza, por dinero, por arbitrario, y que el órgano rector de ese reglamento y que tiene que ver por los derechos de todos sus agremiados, en este caso el Club León, cedió ante los caprichos de alguien que en este momento no tiene nombre ni apellido, pero que muy pronto se sabrá y su ridículo será mayor.
En verdad que no creo que en TAS, órgano jurídico mundial para todos los deportes, cedan ante esta injusticia, simplemente porque perderían credibilidad, mucha que muchos órganos, federales y mundiales han perdido, pero bueno, esto es el TAS. Se trata de deporte, herramienta que mundialmente aliviaría la problemática en jóvenes que vive en todo el mundo y si para tomar poder, X persona se toma de este nuevo reglamento y el TAS lo admite, por lo menos yo, quedaré totalmente decepcionado, de como un mexicano llega a una situación sucia para afectar o vengarse o demostrar a otro mexicano quien manda a nivel mundial.
Ya la FIFA perdió mucha credibilidad ante las decisiones que toma en cuanto a la cantidad de torneos y por lo mismo, de juegos que pone; más partidos, más dinero a sus arcas y ese dinero de más si estuviera puesto para promulgar y respaldar al fútbol en lugares del mundo que no tienen recursos para su práctica, lo pasaría y lo entendería. Lo malo es que no es así: yo FIFA mando ante todos y yo FIFA me hago más grande y poderosa a nivel mundial, agarrándomelo de una causa noble y formativa como es el deporte.
Por supuesto que, la FMF no se ha manifestado ante uno de sus agremiados y lo primero que salta es la nula empatía que tienen sus agremiados: cada uno de ellos ve por sus intereses y lo que le pase a una causa noble supuesto socio como es el León, solo piensan que con sus garras se rasque y que con su saliva se cure esta afrenta, poniendo en la opinión general, en la mesa, el mayor problema que se tiene en nuestro deporte nacional: no hay unión entre los propietarios y que uno de ellos es el Judas de toda esta trama.
Si esta eliminación sucediera, doy mi palabra que en los tiempos que se desarrolle este torneo, ningún partido veré y comentaré. Me sentiría parte de esa gran mentira que se está fraguando y en este cambio que se está fraguando en el mundo, por medio del deporte, este golpe sería todo lo contrario: aquí mandaría el poderoso, el que tiene relaciones, el que ahora le tocó ser socio o estar del lado del poderoso y volaría muy alto, sin saber que mientras más alto vuelas, más duele la caída.
