Pese al intento de Moisés Ignacio Mier Velazco por apaciguar las aguas ante el escándalo de lavado de dinero y evasión fiscal en el que está involucrado, ahora hay que sumar otras aristas: el involucramiento que tuvo para salvarle el pellejo a su socio Arturo Rueda Sánchez de la Vega, luego de ser denunciado penalmente por el priista Jorge Estefan Chidiac por los delitos de extorsión, amenazas y violación de correspondencia. Esta querella fue el antecedente que tomó la Unidad de Inteligencia Financiera para iniciar una investigación en contra del director general de Diario Cambio. Las huellas detectadas llevaron a dicha institución a presentar una denuncia por el manejo irregular de 427 millones de pesos en efectivo. Lo grave es que, de acuerdo con Estefan, la denuncia por extorsión contra Rueda no procedió porque tanto Mier como su socio pactaron con el morenovallismo su exoneración a cambio de iniciar una campaña de desprestigio contra los candidatos opositores: Blanca Alcalá Ruiz y Miguel Barbosa Huerta. El asunto se vuelve todavía más turbio, ya que esta especie asienta que Rueda no escatimó ataques contra el hoy gobernador de Puebla en 2018, a pesar de que Ignacio Mier era vocero de la campaña morenista. ¿Así o más perverso? Por lo mientras, Nacho Mier tendrá que demostrar ante la Fiscalía General del Estado que no tienen ninguna injerencia en el manejo de los 427 millones, a pesar de ser socio de Multisistema de Noticias Cambio, principal empresa investigada. ¿Ignacio Mier no supo lo que ocurría administrativa y fiscalmente con la compañía de la que formaba parte? Es muy ingenuo pensar que no era así, pero eso tendrá que demostrarlo ante las autoridades. Un hecho incontrovertible hasta el momento es que el escándalo que enfrenta el coordinador de la bancada de Morena en San Lázaro tiene su origen en las andanzas de su socio. En otras palabras: le debe agradecer a Rueda que lo haya embarrado de tal forma. Al tiempo.
Precisiones necesarias
Arturo Rueda Sánchez de la Vega subió a sus redes sociales un tuit en el que asentó: “Ayer recordaba nuestras tardes jugando ajedrez cuando @CMezaViveros era secretario de Gobernación y yo un muchacho imberbe!! Querido Carlos, un honor siempre platicar contigo. Te quiero cabrón!”. El texto fue acompañado por una imagen en la que aparecen Carlos Meza Viveros y Manuel Bartlett Díaz, director general de la Comisión Federal de Electricidad. Con ese tuit en las redes, las especulaciones comenzaron. Obviamente, los más afectados fueron Bartlett y Meza, quienes de inmediato salieron a aclarar que sí hubo una llamada telefónica, pero ni se trató el tema de la denuncia penal por lavado de dinero y evasión fiscal ni el exfuncionario estatal le ofreció su apoyo jurídico en este escándalo. El director de Diario Cambio no ha caído en cuenta que es la inversa del Rey Midas: todo lo que toca, lo mancha.
Lalito anda preocupado
Nos cuentan que el alcalde de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, anda muy nervioso porque no sabe a ciencia cierta qué negocia el gobierno del estado con la empresa concesionaria Agua de Puebla para Todos. El proyecto indica que habrá movimientos en el contrato que detenta la compañía con la finalidad de evitar el incremento de la tarifa y eliminar las cláusulas leoninas. El Ayuntamiento de Puebla deberá asumir su responsabilidad en esta jugada, ya que es uno de los principales implicados. Eduardo Rivera, en su primera gestión como alcalde, validó la entrega de la concesión, así que sabe muy bien los alcances que tiene su administración. A lo mejor por eso anda muy preocupado: El agua le quitara la caja chica que quería tener, así como todos los negocios que se cocinan.