Lo que para el Ayuntamiento parecía una victoria para la movilidad en Puebla, terminó siendo un fracaso en tiempo récord. Apenas el lunes, el Ayuntamiento de Puebla, encabezado por Adán Domínguez Sánchez, inauguró con bombo y platillo la peatonalización del perímetro de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
Sin embargo, para el viernes, la obra amaneció con problemas evidentes: agua brotando de los desagües tras una tormenta, lajas levantadas y un desastre que expuso la falta de planeación.
Desde el pasado viernes, las lluvias dejaron al descubierto que los trabajos de rehabilitación vial sobre la calle 21 Sur entre 9 y 13 Poniente, terminaron en inundaciones que afectaron a decenas de personas, tanto transeúntes, estudiantes de la UPAEP como comercios aledaños, pese a la inversión de 50 millones de pesos.
A pesar de que también fueron captadas alcantarillas con agujeros o hundidas y adoquines despegados, el secretario de Infraestructura municipal, Edgar Vélez Tirado, intentó salir al paso de la problemática, pues aseguró que la inundación se debió a la saturación de la red general por las tormentas y no a errores en la construcción.
Según el funcionario, las precipitaciones provenientes de las zonas altas del cerro de La Paz y del norponiente de la ciudad se canalizan naturalmente hacia las áreas más bajas, como el Barrio de Santiago, donde se ubica la UPAEP.
“Históricamente el agua siempre ha pasado por ahí. Cuando estudiaba se inundaba la UPAEP. Obvio que esto se produce porque se satura la red general y el líquido busca a salir. No es un problema de deficiencia de la obra. La pendiente viene desde La Paz y del norponiente de la ciudad, el agua busca la pendiente mayor y por eso se da”, aseguró.
Sin embargo, los vecinos del Barrio de Santiago han señalado que, en reuniones previas con la subsecretaria de Movilidad, Rubí Vázquez Cruz, ya habían advertido sobre la necesidad de que se desazolvara de manera preventiva, ya que en tormentas anteriores habían experimentado problemas similares, situación que el Ayuntamiento no previno.
A esta situación, se agrega que recientemente los vecinos del Barrio de Santiago denunciaron que el cierre de la calle 21 Sur, no fue incluido en los planes iniciales y que los 50 millones de pesos invertidos parecen haber beneficiado únicamente a la institución educativa, en lugar de mejorar la zona para todos los residentes.
El malestar se hizo evidente el pasado 2 de septiembre, cuando los habitantes del Barrio de Santiago se manifestaron enérgicamente frente a la UPAEP. Susana, una vecina desde hace más de 40 años, relató cómo, a pesar de las promesas, la administración municipal avanzó con la peatonalización de manera sorpresiva y sin el consentimiento de los vecinos.
“Nos entregaron documentos que aseguraban que las calles no se peatonalizarían, pero de repente, a las 2:00 de la mañana, colocaron bolardos sin previo aviso”, comentó.
Juan Pérez, otro residente afectado, destacó la falta de comunicación de la Comuna y narró cómo el bloqueo repentino a su acceso domiciliario le llevó a emprender acciones legales.
Las modificaciones que se prometían en ese barrio como mejoras en seguridad, generaron más problemas, incluyendo la falta de banquetas adecuadas y el aumento del tráfico de vehículos, donde inclusive, un incidente ocurrió cuando un vecino fue atropellado durante una protesta contra la peatonalización, lo que intensificó el conflicto en la zona.
