Luego de más de 50 horas paralizada y tras acceder al diálogo con los ejidatarios, este jueves fue reabierta la autopista México-Puebla en ambos sentidos por intervalos de dos horas para desahogar las enormes filas de vehículos y tráileres que permanecían varados en medio del conflicto que inició el martes.
Tras registrarse previamente un conato de bronca entre los choferes de transporte de carga, automovilistas y los campesinos, los inconformes accedieron a liberar la vialidad de manera intermitente.
En entrevista, el secretario de Gobernación del estado, Javier Aquino Limón, confirmó que se alcanzó un acuerdo con los ejidatarios a fin de no provocar mayores daños de los ya generados por el cierre de dicha vialidad que conecta a estados del centro del país.
Aunque la apertura se realizará en intervalos de dos horas por medio de dos carriles, el funcionario estatal confió en que continúen los esfuerzos para que sea liberada en su totalidad.
“En próximos minutos habrá liberación de la vía de comunicación, cosa que lo agradecemos, pero esperamos que no vuelva a ocurrir por las afectaciones a la ciudadanía”, declaró.
De acuerdo con Javier Aquino, el conflicto en la México-Puebla escaló a esta magnitud ya que a este se unieron otros grupos de ejidatarios que reclaman el pago de indemnizaciones por liberación de vía en el Arco Norte, en la Apizaco-Tlaxcala y en un tramo de la autopista Tlaxco-Tecojotal.
Lo anterior, con el objetivo de ejercer una “mayor presión” a la autoridad federal para obtener sus pagos, tal como ocurrió con el pago de 176.2 millones de pesos que recibieron campesinos del ejido de Santa Rita Tlahuapan en 2018.
Aquino Limón reveló que incluso los campesinos son asesorados por el mismo abogado que logró obtener el pago del gobierno federal hace seis años, sin embargo, pese a ello, solo 20 de los 60 ejidatarios recibieron su pago.
