(Primera parte)
Semanas después de la temporada potosina viajamos a Cochabamba, Bolivia. (Marzo 2010).
La ruta estaba marcada desde 2009.
Los que nacemos en el Sol de Virgo, según las cosmovisiones antiguas, solemos tener la vida medianamente programada, aun siendo trotamundos.
Cualidad que representa una virtud, pero también una condena.
Si alguna pieza se mueve o el viento veraniego provoca la improvisación, es normal derrumbar el castillo de naipes labrado en la mente.
Cuando se viaja es distinto. Aun teniendo la ruta planeada, la improvisación es inminente. Tiene la finura de un cortejo con el Tiempo, si estamos conscientes que el Tiempo no es consumible, podemos revitalizar el Tiempo y el Espacio.
Marqué la ruta basándome en un calendario que la Agencia Internacional de Prensa India envió a todos sus contactos en enero de 2009.
El calendario contenía las fechas y lugares programados de 10 Congresos Internacionales de Comunicación Indígena a desarrollarse los próximos meses.
Con el brillo de un cuervo en las pupilas analicé las rutas y las fechas sin decir una sola palabra.
Trace en la mente un patrón.
Colombia = Diciembre
Ecuador = Enero
Perú = Marzo
Bolivia = Mayo
Argentina = Junio/ julio.
Le comenté a mi compañero y planificamos viajar por tierra hasta llegar Argentina. Específicamente a Quilmes para asistir al 7 Encuentro Tawaintisuyu Mapu-Pacha.
Teníamos que pasar por cuatro países y aprovechar los Congresos en turno.
Cochabamba es una de mis ciudades preferidas.
Tiene un aire fresco que rima con los versos de Víctor Jara, Gardel y un eco apenas perceptible de Mercedes Sosa. Aún sin llegar a Tucumán, las costumbres se notan como actos inconscientes entre los cochabambinos.
La conciencia interandina se congrega en el centro de Bolivia.
El Cristo de la Concordia abrazaba las cordilleras que rodean la Kanata (Región Boliviana).
Cochabamba viene del Quechwa: q’ucha=lago, pampa= llano o planicie. Anteriormente era llamado Kanata, debido a que ahí se congregaron los grupos con el mismo nombre. Hasta que el Inca Huayna Capac fundó la Llajta de Q’ochapampa, funcionando como centro estratégico de cultivo.
Gracias a la fertilidad de las tierras y el clima privilegiado ha sido poblada por cientos de años.
Viví en este sitio un año completo dividido en dos temporadas.
Suelo llamarle tiempo de sequías y de lluvias a mi estadía en este lugar.
Aquí es donde el Espacio acoge al Tiempo y se vuelven un vicio interminable de acertijos y certezas.
De día el ajetreo matutino caminando desde el “Hostal Aroma” hasta la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), donde difundíamos nuestro fanzine cultural.
De noche, la calle Aroma se convertía en un tugurio callejero, pero no tan alejado del centro que siempre mantenía un turismo pobre pero fluido.
Algunas noches la Plaza 14 de septiembre nos susurró recuerdos. Porque la organización interna de Evo Morales resonaba en cada rincón de América Latina en ese momento.
Históricamente la plaza es concebida como un espacio político donde se organizan palestras de carácter comunal.
Ahí dimos un taller de periodismo y prensa alternativa después de un año de experiencias y viajes publicando autogestionados.
En el año 2000 los cochabambinos se levantaron en pie de guerra para no quedarse sin agua ante su privatización.
La plaza 14 de septiembre se convirtió en el centro neurálgico de protesta.
El espíritu de la semana de lucha no se fue nunca.
Acepto que la organización y el compromiso de la gente me impactó. “Donde muere un indio nacerán millones”, decían.
Nuestro fanzine era recordado por los profesores de la Universidad: otro punto a favor para permanecer cómodos en la ciudad más grande del país.
En mayo de 2010, Evo Morales convocó en Tiquipaya, la Primera Cumbre Mundial por el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra.
Ahí conocí en persona al presidente Evo y a Hugo Chávez en una rueda de prensa donde mi cámara de principiante grabó los discursos que más adelante se volverían historia.
Mis compañeros viajeros dormían en sus casas de campaña desde el camping destinado a los visitantes. Mientas yo gestionaba mi entrada a este evento histórico donde se habló de hidrocarburos, privilegios y desastres.
Continúa…