El gobernador Miguel Barbosa Huerta dijo que no permitirá que “oportunistas” -como el diputado federal Ignacio Mier Velazco y el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas- hagan escarnio de la balacera ocurrida en el Centro de Salud Francisco I. Madero, en la capital poblana, que dejó como saldo cuatro heridos, entre ellos dos menores de edad, ya que en Puebla la violencia no se normaliza.
Por el contrario, el mandatario enfatizó que en el estado se combate al crimen y los hechos delictivos que de este derivan, además se esclarecen los hechos y se fincan responsabilidades que correspondan conforme a la ley, indicó.
En su conferencia matutina, Miguel Barbosa lamentó el ataque realizado por dos sicarios durante la jornada de vacunación a menores de edad de este martes, sin embargo dijo que fue perpetrado contra un objetivo específico.
En ese sentido, instruyó a la Secretaría de Seguridad Pública estatal a reforzar la vigilancia en todos los centros de vacunación de la capital, en coordinación con la policía municipal y la Guardia Nacional, como una forma responsable de reaccionar para evitar este tipo de acontecimientos, “porque en Puebla no admitimos que la violencia se normalice. Aquí somos un estado que combatimos al crimen, que no engañamos a la gente”, añadió.
Miguel Barbosa se lanzó en contra de aquellos “oportunistas” que se aprovecharon de los lamentables acontecimientos con el afán de promocionarse políticamente, en referencia a las publicaciones que hicieron en sus redes sociales el coordinador de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, Ignacio Mier Velazco, y el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, sobre los hechos.
“Que no sirva esto para promocionarse, de gente que ni viven acá y que tienen mucho que aclarar en cuestiones de vínculos con la delincuencia, yo no admito que este tipo de oportunistas vengan a colgarse de este hecho para promocionarse, porque nadie les hace caso, nadie los toma en cuenta en la opinión pública”, dijo.
Incluso señaló que en Puebla no existe una situación compleja de seguridad como en otros estados como Campeche, cuando gobernó Alejandro Moreno, quien hoy tiene señalamientos sobre presuntos vínculos con el crimen.