La presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, confirmó este viernes que este fin de semana llevará a cabo una gira de trabajo por Puebla, Hidalgo y Veracruz, con el propósito de supervisar las labores de atención a las comunidades afectadas por las lluvias extraordinarias registradas en la última semana.
El anuncio ocurre mientras continúan las tareas de rescate y evaluación de daños en la región, donde los deslaves e inundaciones han dejado al menos 18 personas fallecidas, cinco desaparecidas y 13 comunidades aún incomunicadasen la Sierra Norte de Puebla, según reportes oficiales.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum explicó que la visita tiene como objetivo evaluar en campo el despliegue del Gobierno Federal y fortalecer la coordinación con las autoridades estatales y municipales de las tres entidades.
“Vamos a Veracruz, a Hidalgo y a Puebla”, precisó la mandataria, al descartar por el momento una visita a San Luis Potosí y Querétaro, estados que —dijo— ya se encuentran en una etapa más avanzada de recuperación.
La presidenta subrayó que el recorrido se centrará en verificar la correcta aplicación de los programas sociales y la entrega directa de apoyos del Bienestar a las familias damnificadas.
Durante su mensaje, Sheinbaum destacó que la prevención y la capacidad del Estado son factores clave ante situaciones de emergencia, y reconoció la importancia de contar con infraestructura y equipos propios de atención inmediata. Ante ello, reconoció al gobierno de Puebla por disponer de maquinaria propia, lo que —dijo— ha permitido una respuesta rápida en la remoción de escombros, apertura de caminos y apoyo a las comunidades afectadas.
Sheinbaum aseguró que el Gobierno Federal garantizará la entrega completa de los recursos una vez concluido el censo de viviendas afectadas.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Bienestar, hasta este viernes se habían censado 38 mil 872 viviendas en los estados impactados.
Las lluvias intensas de los últimos días han causado severos daños en caminos rurales, redes de electricidad y viviendas, además de deslaves que mantienen incomunicadas diversas comunidades serranas.