23.8 C
Puebla
miércoles, mayo 7, 2025

Un morenista contra los Sapos

Más leídas

🤮 NO ES NOVEDAD QUE PACO IGNACIO TAIBO proponga nacionalizar Televisión Azteca. En una entrevista con Sabina Berman soltó la exigencia de que la presidenta Claudia Sheinbaum expropiara todo lo que estuviese a su alcance. (En el mejor estilo del comandante Hugo Chávez). La odiadora de Enrique Krauze —al que antes idolatraba hasta la infamia— abrió los ojos y le preguntó: ¿En serio, Paco? “¡En serio! ¡Es la única manera de ponerle el segundo piso a la Cuarta Transformación!”, contestó.

 

👅 TAIBO ES UN VIEJO CREYENTE de que un presidente emanado de la 4T debe gobernar a punta de decretazos. Hace años, planteó que López Obrador le quitara todas sus concesiones a Televisa. Luego vino aquello de que a los traidores a la Patria habría que llevarlos al Cerro de las Campanas, y fusilarlos. Es en parte por esto que admira tanto al Che Guevara y a Pancho Villa. (De ambos ha sido su biógrafo).

 

🔫 JORGE G. CASTAÑEDA ESCRIBIÓ que lo primero que hacía los lunes por la mañana el Che Guevara —al llegar al Ministerio de Agricultura, del que era el titular—, era fusilar a una docena de traidores. Él mismo dirigía el fusilamiento. Los exabruptos de Taibo vienen de ahí: de sus pasiones, de sus lecturas, de sus deseos febriles de acabar con los Sapos, a los que se refirió en el Consejo Nacional de Morena.

 

🐸🐸🐸 ENEMIGO JURADO de Ricardo Monreal, Adán Augusto López y Mario Delgado, Paco Ignacio Taibo los denomina los “Sapos”. Eso significa que no son morenistas, carecen de la ideología 4T y son expertos en traicionar. En un acto público, le escupió que si no podía democratizar a Morena, renunciara.

 

🐸 A MONREAL LO VOMITA por sus debilidades ligadas a la negociación con los enemigos del movimiento. Incluso lo ha acusado de apoyar a partidos conservadores, como el PAN. Todo eso ha hecho Taibo en los últimos años. Sólo un problema tiene: está solo. Más solo que una gorda desnuda entre los faunos. Más solo que una higuera en un campo de golf.

 

⌚️ ANTE LOS LLAMADOS DE TAIBO, la presidenta Sheinbaum sólo sonríe. Le tiene un gran cariño doblado de admiración. Cierto. Pero las rutas de ambos no marchan en paralelo. Taibo es un anarquista cercano al comunismo de los viejos clásicos. Le gusta incendiar las praderas al tiempo que canta La Internacional. De hecho, cuando las incendió el domingo pasado lo hizo delante de los sapos que detesta. ¿Qué hicieron estos? Nada. Sonrieron mientras acariciaban sus relojes de un millón de pesos. Complicado. Muy complicado.

Notas relacionadas

Últimas noticias

spot_img