Donald Trump, presidente de Estados Unidos, recibió este lunes en la Casa Blanca a su homólogo ucraniano, Volodímir Zelensky, en un encuentro clave para el rumbo diplomático del conflicto entre Ucrania y Rusia, especialmente tras la reciente y controversial reunión de Trump con Vladímir Putin en Alaska.
El gobierno estadounidense informó que a la reunión asisten los principales asesores de ambos mandatarios. Por parte de Trump participarán J.D. Vance, vicepresidente de EE.UU.; Marco Rubio, secretario de Estado; Susan Wiles, jefa de Gabinete; Keith Kellogg, enviado especial para Ucrania; y Steve Witkoff, enviado especial para Rusia. En representación del gobierno ucraniano estarán Andriy Yermak, jefe de Gabinete, y Rustem Umerov, exministro de Defensa y actual jefe del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania.
Zelensky llegó en una camioneta negra, ondeando las banderas de Estados Unidos y Ucrania, y fue recibido en la entrada de la Casa Blanca por el propio Trump. En el saludo inicial, el presidente estadounidense calificó como “un honor” recibir al líder ucraniano, mientras que Zelensky le entregó una carta escrita por su esposa, Olena Zelensky, en un gesto diplomático de cercanía y simbolismo.
Durante el intercambio inicial, Trump aseguró haber resuelto seis conflictos internacionales en seis meses, incluido el enfrentamiento con Irán que, según él, pudo escalar a una guerra nuclear. Estas declaraciones se dan en un contexto de creciente aprobación interna: una encuesta de InsiderAdvantage reportó un aumento al 54% en la popularidad de Trump tras su reunión con el mandatario ruso.
Más tarde, Trump sostendrá reuniones bilaterales con varios líderes europeos que arribaron esta mañana a Washington. Entre ellos destacan: Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea; Emmanuel Macron, presidente de Francia; Alexander Stubb, presidente de Finlandia; Keir Starmer, primer ministro del Reino Unido; Friedrich Merz, canciller de Alemania; Giorgia Meloni, primera ministra de Italia; y Mark Rutte, secretario general de la OTAN.
Este encuentro marca un nuevo capítulo en la relación entre Ucrania y Estados Unidos, en medio de una reconfiguración geopolítica impulsada por las recientes decisiones de la administración Trump respecto al conflicto del este europeo.