María Fernanda N., hija del priísta Javier López Zavala, fue vinculada a proceso por los delitos de abuso de autoridad e incumplimiento del deber, lo mismo que Alí Eduardo N., ambos agentes del Ministerio Público que cometieron actos de corrupción, confirmó el fiscal de Puebla, Gilberto Higuera Bernal.
El funcionario estatal precisó que a ambos agentes se les impuso la medida cautelar de prisión preventiva, tras una serie de audiencias que se está llevando a cabo junto con todo el proceso penal, en el municipio de Huauchinango, Puebla.
“El agente y la agente del Ministerio Público, ambos fueron aprehendidos por la Fiscalía, investigados por delitos y motivos que tienen que ver con el ejercicio de sus funciones. No vamos a permitir que nadie abuse de su cargo y todos los casos de corrupción o excesos los vamos a sancionar, sea quien sea. Todo se está llevando en Huauchinango y vamos a estar atentos a que se aplique la ley”, advirtió.
Desde el pasado 15 de octubre, María Fernanda N. fue detenida por agentes ministeriales cerca de la Coordinación General de Información de la Fiscalía de Puebla, en el municipio de San Andrés Cholula. Fue señalada por una serie de denuncias que la acusaban de solicitar dinero a cambio de acelerar la tramitación de carpetas de investigación en su cargo público.
La hija de un influyente político -que hoy está tras las rejas por el feminicidio de la abogada y activista Cecilia Monzón-, enfrenta una maraña de acusaciones por casos de corrupción y abuso de autoridad que parece haberle funcionado durante mucho tiempo en el Ministerio Público.
En el centro de las acusaciones se encuentra la alegación de que María Fernanda cobraba tarifas exorbitantes, que llegaban a los 30 mil pesos, por simplemente llevar a cabo su deber. Además, se le acusa de influir en la selección y despidos del personal, manipulando los casos a su favor.
Su separación del cargo y posterior captura, develó un patrón de abuso de poder, particularmente hacia personas de comunidades marginadas y de origen indígena que buscaban justicia.
Uno de los incidentes más notorios involucra a una mujer indígena de Temaxcal, Tlacuilotepec, a quien María Fernanda se negó a ayudar con su caso de violencia familiar, despreciándola con comentarios ofensivos.
Un acto más de abuso salió a la luz en julio del año pasado, cuando un hombre y su madre denunciaron que la carpeta de investigación FGEP/CDI/FIR/XICO-1/006955/2022 fue archivada por parte de la hija del expolítico, debido a que le recriminaron por no informar sobre el desarrollo de las investigaciones de su denuncia.
