Tras el incidente de violencia machista que sufrió la reconocida activista Olimpia Coral en Huehuetla, Puebla, nuevos indicios rodean el caso: los involucrados forman parte de un consorcio de taxistas ilegales y hay más mujeres víctimas de este grupo que han sufrido acoso similar en la región.
El pronunciamiento de Olimpia Coral Melo fue un contundente llamado de justicia, luego de que Israel N., única persona que había sido detenida por las agresiones del pasado miércoles, fue liberado este sábado 13 de abril a las 10:45 horas, producto de un amparo solicitado y otorgado por las autoridades de Huehuetla.
A través de denuncias anónimas, mujeres señalaron que, en el caso de Israel N., se trata de una persona con antecedentes de acoso, que además continuamente ha infringido el reglamento de tránsito al conducir a altas velocidades, lo que ya le costó la vida a una familia.
“No está demás mencionar que por su culpa murió una familia completa, papás, hijos, nunca se hizo responsable de aquel incidente, lo iban a procesar, pero su hermana pagó una buena fianza para que quedara libre”, fue una de las acusaciones recibidas por la activista.
Entre las acusaciones contra Israel N. y otros involucrados, mujeres señalaron que forman parte de un grupo de choferes de taxis piratas, quienes “suelen hablar y mirar” a mujeres en tono de acoso, además de que utilizan sus presuntas influencias con la policía municipal para salir impunes en cada caso.
“Yo viví una temporada ahí (Huehuetla), y es de los lugares más impunes que pueden existir, un día mi expareja me golpeó y encerró con llave, cuando pasó la patrulla pedí auxilio y terminaron llevándome a mí y dándome una vuelta ‘sólo para que se me pasara el coraje’”, relató otro testimonio.
El testimonio anónimo de una víctima señaló que grupos del crimen organizado con autoridades municipales mantienen estrechos vínculos en la localidad, así como el grupo de taxistas liderado por Israel N.
En tanto, un testimonio más relata que una mujer usaba el servicio de taxi de Israel N. para viajar a Puebla, quien se conducía en distintos momentos con acoso y actitudes “groseras y agresivas”, además de que presuntamente habría protagonizado peleas con otros transportistas que son su competencia.
LA AGRESIÓN
La noche del miércoles pasado, Olimpia Coral Melo vivió una experiencia aterradora en el municipio totonaco de Huehuetla, Puebla. Mientras se encontraba con sus amigas, Manuelita e Isabel, en una tienda, fueron acosadas por varios hombres.
Todo comenzó cuando un hombre se acercó a Olimpia con comentarios lascivos a lo que ella respondió con firmeza. Sin embargo, la situación escaló cuando otro individuo se acercó y comenzó a orinar en la calle frente a ellas.
Al recriminarle su comportamiento, este hombre empezó a insultarlas y, posteriormente, las persiguió hasta su vehículo, donde arrojó una lata de cerveza.
Durante casi una hora, Olimpia y sus amigas enfrentaron la agresión de entre ocho y diez hombres, quienes intentaron abrir las puertas del vehículo y hasta uno intentó ingresar por el quemacocos.
En medio de la angustia, Olimpia decidió transmitir en vivo por Facebook para documentar lo que estaba sucediendo, pero incluso intentaron arrebatarle el celular.
A pesar de haber solicitado ayuda, la policía municipal tardó en llegar, y cuando finalmente lo hizo, un hombre vestido de civil les ofreció seguridad solo en cierta área del municipio, lo cual generó desconfianza y preocupación por su integridad.
Después de la terrible experiencia, Olimpia y sus acompañantes pernoctaron en la Universidad Intercultural del Estado de Puebla y luego se trasladaron a la ciudad de Puebla, donde interpusieron una denuncia por los hechos en la Fiscalía Especializada en Violencia de Género.
Sin embargo, la indignación creció cuando se enteraron de que el único agresor detenido fue liberado al poco tiempo, amparándose en una falta administrativa. Es entonces que Olimpia Coral enfrenta ahora el desafío de buscar justicia y visibilizar la violencia de género que aún persiste en muchas comunidades, como lo es la sierra nororiental de Puebla.
