Un operativo liderado por la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) en un club nocturno clandestino de Colorado Springs resultó en la detención de 114 migrantes indocumentados la madrugada de este domingo.
La redada, que comenzó alrededor de las 3:45 a.m., fue parte de una operación conjunta en la que participaron más de 300 agentes federales y locales. Entre ellos estaban miembros del FBI, ICE, ATF, IRS, el Departamento de Seguridad Nacional y la policía local.
El club, ubicado cerca de Academy Boulevard y Airport Road, llevaba meses siendo investigado por delitos como tráfico de drogas, prostitución y violencia. Durante el allanamiento se incautaron armas de fuego y varias drogas, incluyendo cocaína, metanfetaminas y “tusi” (también conocida como cocaína rosa).
Entre los arrestados se identificaron más de una docena de militares en servicio activo, algunos actuando como seguridad armada. La División de Investigación Criminal del Ejército colabora con la DEA para evaluar posibles sanciones internas.
La fiscal general Pam Bondi elogió el operativo en redes sociales, señalando que el club era frecuentado por miembros del Tren de Aragua y MS-13. También destacó que la medida responde a la política del presidente Donald Trump para “hacer que Estados Unidos vuelva a ser seguro”.
Los migrantes detenidos quedaron bajo custodia del ICE para su procesamiento migratorio. Las autoridades aún no han revelado identidades ni nacionalidades.
Este tipo de operativos reflejan la creciente intensidad en la aplicación de políticas migratorias durante el segundo mandato de Trump, caracterizadas por una mayor coordinación entre agencias para combatir delitos vinculados a la inmigración ilegal.
