Una operación internacional liderada por la Gendarmería Nacional de Francia, en colaboración con las autoridades de Bélgica y el respaldo de Europol, logró desmantelar una organización criminal transnacional dedicada a la producción y distribución de drogas sintéticas en el mercado europeo y global. La red mantenía fuertes vínculos con el Cártel de Sinaloa y otras bandas delictivas activas en Bélgica, España, Países Bajos y Nueva Zelanda.
La investigación comenzó en junio de 2024, tras la incautación de 216 kilogramos de metanfetamina cristalina y la detención de dos ciudadanos franceses. Esta incautación llevó al descubrimiento de una compleja red de producción y tráfico de drogas sintéticas, cuyos líderes, un ciudadano argelino y otro francés, fueron identificados como los principales organizadores de toda la cadena delictiva: desde el contrabando de precursores químicos provenientes de China, la instalación de laboratorios, el “cocinado” de las sustancias, hasta su distribución final.
Ambos líderes operaban con un alto grado de sofisticación, apoyados por el Cártel de Sinaloa, que les proporcionaba conocimientos técnicos, logística y preparación. A su vez, los carteles mexicanos dependían de intermediarios locales para expandir su presencia en Europa. Esta colaboración transnacional es una muestra de cómo las redes criminales operan de forma coordinada entre continentes. Para sus transacciones financieras, la organización utilizaba criptomonedas, lo que dificultaba el rastreo de los recursos ilícitos.
El pasado 19 de mayo, durante el denominado “día de acción”, se realizaron 16 registros domiciliarios que culminaron con la detención de 16 personas: 13 ciudadanos franceses, un belga, un serbio y un individuo con doble nacionalidad mexicana-estadounidense. De estos arrestos, 15 se efectuaron en Francia y uno en Bélgica.
Además, fueron incautados tres vehículos, bienes de lujo valorados en aproximadamente 100,000 euros, cerca de 80,000 euros en cuentas bancarias, teléfonos y dispositivos electrónicos, así como 10,000 euros en efectivo. También se congelaron unos 30,000 euros en criptomonedas, aunque las investigaciones financieras continúan y se esperan nuevas incautaciones.
Durante los operativos, los agentes inspeccionaron un antiguo laboratorio clandestino de metanfetamina, donde hallaron contenedores desechados, residuos químicos y señales claras de vertido ilegal, incluyendo enterramientos, lo que sugiere intentos deliberados de ocultar la magnitud de las operaciones.
Europol, que proporcionó apoyo analítico continuo y facilitó el intercambio de información entre las agencias involucradas, desplegó a un experto en Marsella para colaborar directamente con los investigadores en tiempo real.
Según la Evaluación de Amenazas de la Delincuencia Grave y Organizada de la UE 2025 (EU SOCTA), la producción y tráfico de drogas sintéticas está en aumento dentro del territorio europeo. Anteriormente limitada a ciertas regiones, esta actividad criminal ahora se ha expandido a varios Estados miembros, alimentando mercados tanto internos como internacionales. Se trata de un negocio altamente lucrativo, marcado por la violencia, la corrupción y la infiltración de estructuras legales.
Ya en 2022, un informe conjunto entre Europol y la DEA estadounidense advertía sobre el creciente vínculo entre los cárteles mexicanos y las redes criminales europeas, particularmente en el tráfico y producción local de metanfetamina y cocaína. Los carteles han brindado apoyo técnico, incluyendo la provisión de “cocineros” expertos en metanfetamina y asistencia en la instalación de laboratorios para la conversión de cocaína.
Este golpe coordinado a nivel europeo representa un avance significativo en la lucha contra el narcotráfico internacional y pone en evidencia la capacidad de cooperación entre fuerzas del orden para enfrentar estructuras criminales de alcance global.
