Staff HL
La relación entre Puebla y China debe enfocarse en lo que “es común” a ambos mercados, para que el intercambio comercial y el de inversiones tenga resultados concretos, dijo el embajador Sergio Ley.
La disponibilidad de mano de obra calificada y de infraestructura industrial en Puebla serían atractivos para atraer inversión china, afirmó Sergio Ley al impartir la conferencia “Negocios en China”, organizada por el Consejo Mexicano de Comercio Exterior región sur (Comce-sur), que preside Antar Mendoza, donde se contó con la asistencia de la secretaria de Economía, Olivia Salomón, así como de representantes empresariales y de universidades de varios estados del sureste del país.
Asimismo, Ley destacó el dinamismo económico que por años ha tenido la nación asiática, tan solo en 2021 hizo inversiones en otros países por 132.9 mil millones de dólares, su Producto Interno Bruto creció ocho por ciento y dentro de ocho años (2030), seguramente, será la primera economía del mundo desplazando a Estados Unidos.
México tiene que diversificar su producción y sus mercados, aprovechar los diversos tratados comerciales que tiene, ese caso es el de Puebla.
“No se puede depender solo de Estados Unidos cuando hay otros mercados interesantes para el intercambio comercial y canalizar la inversión”.
Puebla tiene la capacidad para albergar inversión productiva que sea para la exportación, en beneficio de la industria y de la economía locales, donde el aeropuerto -en Huejotzingo- puede ser un polo para el desarrollo de gran calado.
“En la región de Puebla hay infraestructura industrial, mano de obra altamente calificada en el ramo automotriz, y China ha avanzado en este sector, lo mismo que en tecnologías de la información y en energías limpias, por ello hay que alentar la inversión en la manufactura”, aprovechar la ventaja competitiva del estado, señaló Sergio Ley, presidente del sector Asia Pacífico del Comce nacional.
La secretaria de Economía, Olivia Salomón, destacó que Puebla trabaja en la conformación de clústeres en los sectores agroalimentario, textil-confección, servicios empresariales y tecnologías de la información, educación y desarrollo de talento, junto a los existentes de las industrias automotriz y energética, para impulsar la competitividad del estado; por consiguiente, existe el interés de fortalecer la relación con la nación asiática.
