Se trata de un litigio cuya antigüedad abarca al menos 18 años. Los principales afectados son los integrantes de una asociación civil de la colonia Vicente Guerrero que durante este tiempo han peleado a capa y espada la propiedad de un terreno de 62 mil 350.85 metros cuadrados, donde actualmente están asentados los campos conocidos como El Seminario.
Para los colonos, el problema no solo ha sido un letárgico juicio que se ha peleado desde el año 2004 para conservar el espacio que se ubica sobre la Calle Tehuacán número 516, entre las Calles Morelos, Juárez, Tehuacán y Privada 5 de Febrero, de la colonia Vicente Guerrero.
Las dificultades las han encontrado también en el nulo apoyo del Ayuntamiento de Puebla para conciliar la recuperación del predio, pues la Comuna pretende echar por la borda dos procesos de expropiación que fueron avalados durante la administración del exalcalde Luis Paredes Moctezuma y en la recta final de la gestión de la morenista Claudia Rivera Vivanco.
La regidora presidenta de la Comisión de Desarrollo Urbano municipal, Susana Riestra Piña, advirtió que ambos acuerdos de expropiación serán revertidos en la próxima sesión de Cabildo, toda vez que presuntamente, los campos siempre le han pertenecido a una mujer llamada María del Rosario Tamayo Mena.
Los antagonistas de esta pugna son señalados como la familia Bojalil, a quienes los colonos señalan directamente por utilizar a prestanombres para querer apropiarse del espacio público desde 2004, con la intención de edificar viviendas de interés social.
Sin embargo, según versa en expedientes, desde el 2 de mayo de 2004 existe un acuerdo publicado en el Periódico Oficial del Estado, en el cual se decretó expropiar por causa de utilidad pública los campos deportivos El Seminario en favor del Ayuntamiento de Puebla, por lo que este espacio no es propiedad de la persona quien se ostenta como dueña sino del municipio.
Las sospechas de un posible conflicto de interés incrementan al considerar que Ernesto Bojalil, exsíndico municipal en el primer trienio del alcalde Eduardo Rivera Pérez, es señalado por querer apropiarse del espacio en representación de la señora María del Rosario Tamayo, quien se ostenta como propietaria legítima del predio.
HISTORIA DE LA PUGNA
La pugna por el control de los campos El Seminario comenzó desde 2004, cuando durante la administración del exedil Luis Paredes Moctezuma fue publicado un decreto para expropiar por causa de utilidad pública el terreno de 62 mil metros cuadrados para la instalación de un centro deportivo, derivado de un amparo ganado por activistas y vecinos.
Para entonces, debido a una serie de pugnas legales, los campos El Seminario ya habían reducido su extensión al pasar de 80 a 60 metros cuadrados, espacio que fue repartido entre construcciones de particulares, fraccionamientos privados e instituciones educativas, como un campus de la UPAEP que actualmente está asentado en el sitio.
Con el paso del tiempo, los campos siguieron siendo del usufructo de los vecinos de colonias como Vicente Guerrero, Centenario 5 de Mayo, Carmen Álamos, Héroes de Puebla y Jesús Reyes Heroles, para canchas de futbol y beisbol.
Durante la gestión del priista Mario Marín Torres se cambió el uso de suelo del predio. La intención, acusaron los inconformes, fue favorecer directamente a la familia Bojalil para que se hicieran del control del espacio, aun cuando no contaban con ningún tipo de escrituras. Esta estrategia desconocería la expropiación de años atrás.
Aunque la familia Bojalil ganó un amparo para hacerse del lugar, e incluso ingresaron maquinaria pesada para cercar el perímetro, el tiempo dio la razón a los vecinos, pues en abril de 2015, el Primer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa les concedió un amparo presentado a través del recurso de revisión número 469/2014 para evitar que el predio fuera entregado a la familia Miguel Bojalil.
En agosto de 2021, a dos meses de concluir la administración de la morenista Claudia Rivera Vivanco, el Cabildo de Puebla aprobó el inicio del proceso de expropiación de 6 mil 098.3 metros cuadrados de superficie de terreno de los campos El Seminario para la instalación de un centro deportivo.
“A fin de que las colonias aledañas a los campos deportivos que carecen de unidades de equipamiento urbano para la recreación y el deporte se vean beneficiadas con dicha instalación”, versa en el dictamen.
A pesar de que documentos sustentan que los campos El Seminario fueron expropiados y se inició el procedimiento para declarar causa de utilidad pública, la regidora Susana Riestra Piña insiste en que los campos nunca han sido del Ayuntamiento o de los vecinos y que “siempre han tenido dueña”.
Con la decisión del Cabildo, el Ayuntamiento de Claudia Rivera Vivanco habría incurrido en posible daño patrimonial al invertir recursos municipales para la rehabilitación de un predio cuya propiedad es de un particular; o bien, el gobierno panista cometería una serie de delitos al reestablecer un predio a un tercero cuya propiedad es en realidad del Ayuntamiento capitalino.