El alcalde de Puebla, José Chedraui Budib, dio el primer paso para modernizar la red semafórica de la capital, al lanzar una licitación pública nacional que permitirá también la colocación de señalética y otros proyectos relacionados con la seguridad vial, siendo esta una de sus promesas de campaña para eficientar la movilidad en las calles de la Angelópolis con tecnología.
De acuerdo con las bases de la licitación, el gobierno municipal planteó dar mantenimiento preventivo y correctivo a la red semafórica de la ciudad, a fin de mantener 95 por ciento de la infraestructura operando correctamente de manera diaria.
Este plan contempla la actualización tecnológica de al menos 100 cruceros, la instalación de 400 nuevos semáforos con tecnología LED y la conexión centralizada de dispositivos para optimizar la gestión del tráfico, todo en un plazo no mayor a los 24 meses a partir de la fecha de firma del contrato.
Este contrato multianual vencerá en octubre de 2027, cuando Pepe Chedraui termine su periodo como alcalde, mientras que el fallo se dará a conocer el próximo 12 de febrero a las 12:00 horas.
TIEMPOS DE RESPUESTA Y CENTRALIZACIÓN
La convocatoria establece que el servicio de mantenimiento preventivo se enfocará en prevenir fallas antes de que los componentes semafóricos lleguen al final de su vida útil, lo que incluye el reemplazo de cabezales semafóricos, sistemas de control, cableado y dispositivos electrónicos.
En cuanto al mantenimiento correctivo, el proyecto contempla la reparación inmediata de fallas imprevistas que afecten el funcionamiento de los semáforos, por lo que se estableció que la empresa contratista deberá dar respuesta en tiempos de entre 24 y 48 horas desde la notificación del problema, además de realizar desde 7 mil hasta 16 mil acciones de mantenimiento durante todo el periodo de prestación de servicios.
Por otro lado, se acordó dar una actualización completa al inventario de semáforos, utilizando una base de datos con proyección cartográfica de todos los cruceros semaforizados en la ciudad, además de que se contempla la limpieza de toda la red semafórica del municipio.
Los tiempos de respuesta se dividirán en tres categorías según la urgencia. Las reparaciones mayores, como la reconstrucción de bases de concreto o postes derribados, deberán resolverse en un máximo de 48 horas, mientras que las reparaciones convencionales, como cambios de luces o ajustes menores, tendrán un tiempo límite de cuatro horas. Por otro lado, un semáforo apagado o desprogramado, deberá atenderse en menos de tres horas.
La convocatoria precisa que la empresa que sea contratada, tendrá que conectar al menos 83 cruceros que disponen de la electrónica necesaria para ser centralizados e incrementar 171 licencias al sistema de gestión de tráfico.
La empresa también deberá incluir un análisis detallado del tráfico para entender cómo se mueve la ciudad, por lo que se medirá cuántos vehículos circulan durante 14 horas al día y se identificarán los horarios con mayor congestión, desde automóviles hasta bicicletas y camiones.
Pero eso no es todo, con la nueva concesión se instalarán dos pantallas gigantes en las entradas de la ciudad para informar a conductores sobre el tráfico, el clima y alertas importantes en tiempo real.
RENOVARÁN SEÑALAMIENTOS
En la convocatoria, la Comuna se comprometió a mejorar la señalización de la ciudad. En cuanto a la horizontal, se marcarán calles con pintura especial para que los conductores sepan por dónde conducir, se delimitarán los carriles, las zonas peatonales, las flechas de dirección y otras marcas importantes. Además, la compañía usará pintura termoplástica en el 60 por ciento de los casos, la cual es duradera, y en el resto se utilizará pintura para tráfico.
Este trabajo incluye el mantenimiento de más de 100 kilómetros de líneas y 36 mil metros cuadrados de marcas, como las cebras peatonales y las señales de alto. Las intervenciones se harán en las principales intersecciones y cruces de la ciudad, cubriendo un área de 50 metros alrededor de cada cruce importante.
Respecto al señalamiento vertical, se instalarán más de mil nuevas señales y se reemplazarán las viejas que ya no cumplen su función, esto para dar indicaciones sobre velocidad, direcciones y zonas de peligro. Para asegurarse que tengan durabilidad, las señales se colocarán con postes de acero y se fijarán con concreto, con lo cual difícilmente serían derribadas.
SEGURIDAD VIAL
Las bases establecen además que, en los primeros ocho meses de trabajo, la empresa deberá entregar estudios detallados sobre las zonas conflictivas, junto con un plan para mejorar la infraestructura, que incluirá desde pasos peatonales hasta ciclovías y mejoras en la señalización y semáforos.
La intervención se enfocará en tres áreas principales: la infraestructura peatonal, ciclista y vehicular, con lo cual se ampliarán las aceras, se instalarán carriles exclusivos para ciclistas y se modificarán las intersecciones para hacerlas más seguras. Además, se buscará reducir la velocidad en las zonas más peligrosas con el uso de reductores de velocidad y semáforos inteligentes.
Los primeros cambios se concentrarán en las 10 intersecciones más conflictivas de la ciudad, donde se registran altos índices de accidentes graves. La mejora en estos puntos incluirá desde mayor iluminación hasta la creación de refugios peatonales.
