La presidenta de la Junta de Gobierno y Coordinación Política en el Congreso de Puebla, Laura Artemisa García, desmintió al edil Adán Domínguez Sánchez, al afirmar que el Ayuntamiento de Puebla sí consideraba la contratación de un crédito de 600 millones de pesos para cubrir un déficit financiero en la administración municipal.
Sin embargo, aclaró que dicha solicitud nunca llegó formalmente al Congreso local y que, antes de ser presentada, debía pasar por el proceso de aprobación en el Cabildo municipal.
García Chávez anunció que será la Auditoría Superior del Estado (ASE) la que se encargue de revisar la situación financiera del Ayuntamiento de Puebla, tras el anuncio de un déficit en las arcas municipales.
Además, señaló que, aunque la ASE tiene la responsabilidad de auditar a los 217 municipios del estado, el caso de Puebla capital ha cobrado especial relevancia debido al impacto del crédito que el gobierno municipal había contemplado solicitar.
La legisladora aseguró que, como resultado de la visita del alcalde sustituto y su tesorero municipal, Omar Coyopol, a las oficinas del Congreso, el pasado lunes, se les comentó que desde el legislativo no era posible intervenir para avanzar con la línea de crédito, sino hasta que hubiera primero un aval del Cabildo.
“Buscaron las líneas de comunicación, pero comentamos que nosotros no podíamos hacer nada hasta que no se dieran los procedimientos adecuados, que se cumpliera con el Cabildo. Ya está en la cancha de donde debe estar, por supuesto, la Auditoría tendrá que entrar en una revisión precisa de las finanzas de todos los municipios”, apuntó.
Lo anterior desmintió totalmente la versión del alcalde sustituto Adán Domínguez, quien, en un intento por salir del paso, en redes sociales calificó como “especulaciones”, su visita al Congreso local para solicitar la aprobación de dicha línea de crédito por 600 millones de pesos.
VISITA DOCUMENTADA
El pasado 7 de octubre, cuando escaló el escándalo por el quebranto financiero de la Comuna, Domínguez Sánchez se presentó en la sede del legislativo para hablar sobre la posibilidad de adquirir deuda, pero la falta de un acuerdo con el Cabildo y los regidores tanto de Morena-PT como del PAN, impidió que se diera seguimiento a su propuesta.
Su visita en el Congreso duró alrededor de una hora y posteriormente salió de prisa en su camioneta Suburban, así como con escoltas, a fin de huir de los cuestionamientos de los medios de comunicación que querían conocer sobre el acuerdo.
Horas después, cuando el Tesorero municipal presentó los Estados Financieros de septiembre, evitó reconocer el motivo de la reunión en el Congreso local: “No tengo conocimiento de ninguna línea de crédito, no sé si se solicitará”.
En su declaración —que poco encajó con los hechos—, aseguró que fue invitado por el presidente municipal para acompañarlo a la reunión, pero supuestamente, no tuvo posibilidad de ingresar y tampoco a la salida pudo dialogar con Adán Domínguez para que le platicara sobre los acuerdos.
Posteriormente, este martes, Adán Domínguez anunció que no se solicitaría el crédito y que dejaría un saldo de mil 436 millones de pesos en las arcas municipales, además de una deuda con proveedores de 448.2 millones de pesos.
“Ante las especulaciones que han circulado respecto a las finanzas del Ayuntamiento, informo: No hay necesidad de solicitar un crédito bancario. Sí existe presupuesto suficiente para garantizar la prestación de servicios y la operatividad del gobierno entrante en 2024”, colocó en su cuenta de X.
Su deslinde de la deuda contrastó con las declaraciones de la presidenta del Congreso, así como con las cifras de las finanzas municipales, las cuales señalan que aunque el gobierno municipal de Pepe Chedraui proyectaba tener recursos por 2 mil 089 millones de pesos de octubre a diciembre, derivado de recaudaciones propias de la ciudad, pero ahora sólo podría aspirar a reunir mil 436.6 millones de pesos, pues el restante fue recurso del pago anticipado de predial que se gastó el equipo de Adán Domínguez, además, sólo hay 469 millones disponibles en bancos, los cuales ya están comprometidos.
