Este fin de semana el alcalde Eduardo Rivera Pérez, pretendió mandar un mensaje de “unidad” al interior del PAN, y erigirse como el virtual candidato de la alianza PRI-PAN-PRD a la gubernatura, pero sus planes fracasaron por el desdén del presidente nacional de su partido Marko Cortés Mendoza a la llamada “comida de la unidad”.
También fueron notorias las ausencias de los diputados locales Rafael Micalco Méndez y Mónica Rodríguez Della Vecchia, quienes han sido críticos del edil panista, en el encuentro celebrado el pasado sábado.
Eduardo Rivera llevó a cabo el encuentro sin la presencia de Marko Cortés, ni del secretario nacional de Elecciones, Armando Tejeda, quien un día antes estuvo reunido con integrantes de la dirigencia estatal panista.
Cortés Mendoza vendría a Puebla -según los planes del alcalde- a refrendar su apoyo e inclinar la balanza hacia su grupo para que él encabece la candidatura a la gubernatura en el 2024, aún con la presencia de otros panistas que han levantado la mano, como Ana Teresa Aranda, Genoveva Huerta Villegas y Francisco Fraile García.
Entre los liderazgos convocados se encontraban diputados locales y federales, y la senadora Nadia Navarro Acevedo; incluso Huerta Villegas, quien en noviembre de 2021 le peleó la dirigencia estatal al grupo del alcalde, acudió a este encuentro.
En la reunión también participaron quienes integran la dirigencia estatal panista: Augusta Valentina Díaz de Rivera Hernández, a la sazón presidenta del Comité Directivo Estatal (CDE), y Marco Castro Martínez, secretario general.
EL REGRESO DE ROBERTO GRAJALES
Llamó la atención que en este encuentro de “liderazgos” participara el morenovallista Roberto Grajales Espina, quien actualmente se desempeña como magistrado de la Segunda Sala en Materia Civil del Tribunal Superior de Justicia del estado.
Roberto Grajales representa una de las últimas posiciones que incrustó el morenovallismo en el Poder Judicial (llegó por imposición del exgobernador Rafael Moreno Valle en noviembre de 2012).
Hoy, gracias a su cercanía con el panista Ángel Alonso Díaz-Caneja, ha podido buscar refugio en el grupo yunquista de Eduardo Rivera, lo cual no ha sido bien visto por los propios colaboradores del edil.
En enero de 2021, el quintacolumnista Mario Alberto Mejía reveló que Roberto Grajales intentó orquestar una conspiración para imponer a la magistrada Margarita Gayosso en la presidencia del Tribunal, para lo cual se alió a magistrados no afines al gobernador Miguel Barbosa, pero no lo consiguió y en su lugar resultó electo al magistrado Héctor Sánchez Sánchez.