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jueves, marzo 28, 2024

Los Jenkins ahora demandan para no ser removidos de la administración del patronato

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Los integrantes del patronato de la Fundación Mary Street Jenkins (FMSJ) se mantienen aferrados a su resquicio de poder, al anunciar que han iniciado demandas, así como denuncias civiles y penales para evitar que sean relevados de la administración que actualmente está instaurada en Jalisco.  

La situación es que el pasado 4 de marzo, la Junta para el Cuidado de las Instituciones de Asistencia Privada del Estado de Puebla, a cargo de José Daniel Vázquez Millán, inició un proceso administrativo para relevar a los integrantes del Patronato y colocar a una nueva junta directiva.  

Lo anterior luego de que seis integrantes de la familia Jenkins aún cuentan con órdenes de aprehensión al estar involucrados en el desfalco a la Fundación mediante el envío de 630 millones de dólares, que equivalen a 12 mil 689 millones de pesos, con destino a paraísos fiscales de Barbados y Panamá.  

La intención de colocar a nuevos integrantes en el Patronato provocó el enfado de los emisarios de la familia Jenkins, quienes acusaron que el proceso administrativo promovido a inicios de mes ocurre sin que cuenten con facultades, por lo que aseguraron que la consecuencia será la reparación de todos los daños que se lleguen a ocasionar en contra de la Fundación.  

“En esta maniobra ilícita se encuentran coludidos Guillermo Jenkins de Landa y José Daniel Vázquez Millán, con la intención de violentar una vez más los derechos de la institución y su patronato legalmente constituido, como está debidamente acreditado en resoluciones firmes del Poder Judicial”, apuntó la FMSJ en un comunicado.   

La misiva firmada por el representante legal, Félix Edmundo Bautista Salazar, advierte que las acciones de la Junta para el Cuidado de las Instituciones de Asistencia Privada del Estado de Puebla, que representa José Daniel Vázquez Millán, son una “trampa” que vulnera el estado de derecho.  

El conflicto al interior de la Fundación Mary Street Jenkins resurgió este martes, luego de que los alfiles de la familia Jenkins que se encuentran prófugos de la justicia, denunciaron que hay una presunta colusión para colocar a un nuevo patronato “espurio”.  

Este nuevo patronato estaría conformado por Óscar Alejandro Franco Salazar, Antonio José Francisco Caballero y Fernández; Alejandro Sepúlveda Ortega y Pablo Jenkins Gavito, supuestamente afines a Guillermo Jenkins de Landa.   

La fractura dentro de la FMSJ surgió luego de que seis integrantes de la familia Jenkins, con el apoyo del exgobernador Rafael Moreno Valle, avalaron en 2013 cambiar los estatutos de la Fundación para que ésta quedara con un patrimonio base de 90 millones de dólares, mientras que los 630 millones restantes quedaron a libre disposición para usarse en beneficencia, así como para fines comerciales y financieros.   

Lo que vino después fue que dicho dinero, que quedó a libre disposición, fue trasladado a paraísos fiscales de Barbados y Panamá mediante la triangulación de recursos a través de una organización civil de reciente creación: la Fundación Bienestar de Filantropía, cuyos patronos eran los mismos integrantes de la familia Jenkins y en donde trasladaron los recursos millonarios para evitar levantar sospechas.   

Tras el seguimiento de la ruta del dinero por parte de las autoridades, en julio de 2020 se hicieron efectivas órdenes de aprehensión en contra de los Jenkins por los delitos de lavado de dinero, fraude, delincuencia organizada, evasión fiscal y otros delitos, además de que la Junta para el Cuidado de las Instituciones de Asistencia Privada del Estado de Puebla determinó colocar a Horacio Magaña como nuevo representante del patronato de la Fundación UDLAP.   

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