La exconsejera jurídica del Ayuntamiento de Puebla, Yasmín Flores Hernández, y la exdirectora en la Secretaría de Gobernación municipal, Margarita Rodríguez Daruich, irán a juicio por el delito de amenazas.
Tras casi tres años evadiendo el proceso penal, una de las presuntas implicadas en el acoso, hostigamiento, discriminación y violencia política de género contra Yasmín Flores, durante la administración de Claudia Rivera, irán a juicio con la víctima a la que se han negado en reconocer y han revictimizado.
Tras celebrarse la audiencia intermedia en donde se aportaron las pruebas pertinentes por parte del Ministerio Público de la Fiscalía General del Estado (FGE), el Juez de Control de la Región Centro de Puebla, Enrique López Criollo, dictó la apertura del juicio oral entre las dos partes.
“Se remite el correspondiente auto de apertura a juicio oral a Margarita Rodríguez Daruich, por los delitos de amenazas previsto y sancionado por los artículos 290 fracción I, en relación los diversos, 13 y 21 fracción I del Código Penal para el Estado de Puebla, cometido en agravio de Yasmín Nallely Flores Hernández”, dictó el Juez de Control durante la audiencia celebrada en Casa de Justicia de la ciudad de Puebla.
De acuerdo con dicho artículo del Código Penal local, “se impondrá de seis meses a dos años de prisión y multa de cinco a 20 Unidades de Medida y Actualización: Al que por cualquier medio amenace a otro con causarle un mal en su persona, honor, bienes o derechos o en la persona, honor, bienes o derechos de su cónyuge o persona con quien viva en la situación prevista en el artículo 297 del Código Civil, o de un ascendiente, descendiente o hermano suyo, o persona con quien se encuentre ligado por afecto, gratitud o amistad”.
Durante la audiencia intermedia el Juez de Control indicó que Rodríguez Daruich se encuentra como autor material directo, siendo su conducta a título de dolo directo, por lo que se ordena remitir el auto de apertura y los registros correspondientes al tribunal de enjuiciamiento a través de la administración.
Yasmín Flores explicó que, durante la audiencia, el Juez de Control evaluó todas las pruebas que presentaron a través del Ministerio Público, las cuales fueron admitidas en su totalidad para determinar que era procedente seguir con el juicio oral.
Entre las pruebas que aportó el equipo jurídico de la extrabajadora del Ayuntamiento de Puebla se encuentra las facturas de los gastos por todo el proceso penal, los dictámenes psicológicos y victimológicos de la fiscalía a ella y a su hija, entre otras pruebas.
El equipo de Rodríguez Daruich solicitó al Juez de Control que se retirara de las pruebas presentadas un contrato de un bufete jurídico que ella metió en que les asignan al abogado que tiene como su asesor jurídico —José Raúl Porras Martínez—, debido a que apuntaron que no aparecía la firma del litigante dentro del contrato, sin embargo, esta petición fue desechada.
“(Ahora) lo mandan a los Juzgados de Oralidad y ellos tendrán que dictaminar, obviamente el Tribunal de Justicia tendrá que dictaminar qué juez nos toca, y de ahí partir para que nos den fecha, y aquí se determinaría la culpabilidad de ella y la reparación del daño como tal, pedimos las máximas penas, el Ministerio Público estuvo bien en pedir las penas máximas que marcan el Código de Procedimientos Penales”, añadió Yasmín Flores.
La exconsejera jurídica del Ayuntamiento de Puebla sufrió de hostigamiento por negarse a firmar el acta de entrega-recepción de la renuncia que le exigió Claudia Rivera a su cargo por requerir el “carácter de un hombre” para las tareas de la consejería.
Yasmín Flores denunció actos de hostigamiento y acoso laboral por parte de René Sánchez Galindo –secretario de Gobernación– y Margarita Rodríguez Daruich, ya que un vehículo adscrito a la secretaría –un Dodge Attitude con placas UBP-1765– la siguió por varios días y le tomó fotografías.
Al momento de intentar desaparecer las pruebas, Yasmín Flores se percató que dicho vehículo formaba parte del parque vehicular del municipio, por lo que se negó a realizar dicho trámite, aunque terminó renunciando al cargo.