Con el telón de fondo del Instituto Electoral del Estado (IEE) a punto de entrar en acción, el próximo 5 de noviembre dará oficialmente inicio el proceso electoral ordinario en el estado, una contienda en la que Puebla se disputará la mayor cantidad de cargos de elección popular entre los estados que renovarán a sus gobernantes y que es de vital importancia, al considerar que la entidad aporta el quinto mayor número de votantes en la República.
El estado de Puebla se convertirá en el epicentro de la democracia mexicana con la elección de un total de 2 mil 286 cargos. La lista abarca desde la gubernatura hasta las 41 diputaciones locales, distribuidas en 26 de mayoría relativa y 15 plurinominales.
Además, se decidirán las riendas de las 217 presidencias municipales, 217 sindicaturas y mil 810 regidurías, todos cargos vitales para el funcionamiento de la entidad.
Y el ámbito federal, no se queda atrás, con la elección del próximo presidente de la República -cuyos partidos políticos en disputa ya cuentan con un proceso sumamente avanzado-, así como los 128 escaños del Senado de la República y 500 representantes en San Lázaro.
Puebla lidera el conteo en cuanto al número de cargos en juego, pero no está solo en esta batalla. Estados como Jalisco y el Estado de México también aportan a la magnitud de esta competencia, con mil 520 y mil 302 cargos respectivamente.
Además, territorios como Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Tabasco, Veracruz y Yucatán, así como la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, también estarán eligiendo a sus próximos líderes.
El día de la jornada electoral, alrededor de 8 mil casillas se instalarán para permitir que casi 5 millones de votantes inscritos en la lista nominal en el país ejerzan su derecho al voto. Esto requerirá una logística sin igual y un esfuerzo conjunto para garantizar una elección transparente y justa.
La contienda se desenvolverá en un calendario ajustado. La precampaña, que abarca desde el 25 de diciembre al 3 de enero, dará paso a las campañas que se desarrollarán del 31 de marzo al 29 de mayo, esto en el caso de la gubernatura poblana.
En este período, los candidatos a los más de dos mil cargos presentarán sus propuestas y buscarán persuadir a los votantes. Luego, entraremos en la veda electoral, un período donde está prohibido que los candidatos hagan llamados al voto, permitiendo a la gente reflexionar sobre las propuestas.
Finalmente, el 2 de junio, de 8:00 a 18:00 horas, los poblanos podrán votar para elegir a sus próximos gobernantes.
El Instituto Electoral del Estado (IEE) ha solicitado un presupuesto total de mil 280 millones 242 mil 72 pesos para llevar a cabo este proceso electoral, con 506.6 millones destinados a los partidos políticos para impulsar a sus mejores propuestas.
Para las elecciones estatales tienen derecho a participar diez partidos políticos. Siete son partidos políticos con registro nacional: Partido Acción Nacional (PAN), Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido de la Revolución Democrática (PRD), Partido del Trabajo (PT), Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Movimiento Ciudadano (MC) y Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Por otro lado, tres partidos políticos cuentan con registro local: Nueva Alianza Puebla, Pacto Social de Integración y Fuerza por México, Puebla, éste último, aunque había perdido su registro, en abril de este año la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), le revivió su empadronamiento.
La próxima contienda electoral tendrá un desafío importante: superar el 56.02 por ciento de participación ciudadana que se registró en el proceso electoral del 2021, en el cual se eligieron 41 diputaciones locales y los 217 Ayuntamientos. En dicha contienda, de 4.7 millones de habitantes registrados, se registraron 2.3 millones de votantes y 81 mil 596 sufragios declarados nulos.
En dicho proceso electoral, Morena emergió como la fuerza política dominante al alcanzar una victoria contundente tanto en el Congreso local como en los Ayuntamientos. Con un total de 803 mil 337 votos, lo que representa el 30.79 por ciento del total de sufragios y al convertirse el partido guinda en la cima como la primera fuerza en el Congreso local.
Este logro le otorgó 16 diputados locales, de los cuales 14 son por mayoría relativa, es decir, aquellos que ganaron en sus respectivos distritos y dos son plurinominales.
El PAN, por su parte, alcanzó la segunda posición con 468 mil 351 votos, que equivalen al 17.95 por ciento de las preferencias. Este resultado le otorgó un total de nueve legisladores en el Congreso local, con seis de ellos obtenidos por mayoría relativa y dos por la vía plurinominal.
El PRI, ubicado como la tercera fuerza política, consiguió 379 mil 491 votos, representando el 14.54 por ciento de los votantes, y se hizo con seis diputados, de los cuales tres son de mayoría relativa y tres son plurinominales.
En lo que respecta a las elecciones en los Ayuntamientos, Morena consiguió un respaldo con 599 mil 478 votos, que constituyen el 22.56 por ciento de los sufragios emitidos. El PAN se colocó en el segundo lugar con 521 mil 400 votos, que equivalen al 19.62 por ciento, seguido por el PRI con 432 mil 407 votos, es decir, el 16.27 por ciento del electorado.
En lo que respecta a la elección intermedia extraordinaria en la que se decidió el destino de la gubernatura de Puebla tras el deceso de la exgobernadora Martha Erika Alonso, resultado de una breve distancia del proceso electoral del 2018, en 2019 la participación electoral fue del 33.40 por ciento.
En dichos comicios, el exmandatario Miguel Barbosa Huerta obtuvo el triunfo con 687 mil 341 votos, manteniendo a Morena como el partido fuerte, en tanto que el PAN, cuyo candidato fue Enrique Cárdenas Sánchez, quedó por debajo con 508 mil 154 sufragios y el PRI con 283 mil con Alberto Jiménez Merino.