Se cumplen tres años desde que pobladores escucharon el estruendo en campos de cultivo por la caída del helicóptero en el que volaban la gobernadora Martha Érika Alonso y el senador Rafael Moreno Valle a bordo.
Por el accidente, seis personas que laboraban en la empresa Rotor Flight Services han sido detenidas y vinculadas a proceso bajo el delito de homicidio culposo, daño en propiedad ajena a título de culpa y falsedad en declaraciones.
Desde entonces, los principales integrantes de ese grupo político fueron aprehendidos o desaparecieron de la escena política y las principales obras del morenovallismo están en la lupa del gobierno del estado por presunta corrupción.
Con el paso de los años, pocos son los perfiles que aún usan el estandarte del morenovallismo: algunos decidieron cambiarse a las filas de Morena en las pasadas elecciones por oportunismo y otros simplemente se exiliaron.
De todos, el caso más ejemplar es el exgobernador Antonio Gali Fayad al ser parte de una decena de investigaciones por las sospechas de malversación de recursos que van desde uso de empresas factureras para el desvío de 102 millones de pesos en su periodo como alcalde de la capital poblana hasta la falta de comprobación del dinero del seguro de gastos catastróficos que se hizo efectivo tras el sismo del 19 de septiembre 2017 y otras anomalías.
El deceso de las cabezas del morenovallismo. Sin embargo, fue poco relevante en temas monetarios para sus adeptos. El gobernador Miguel Barbosa Huerta reveló que el funeral, así como el de dos pilotos y el asistente particular de Moreno Valle, dejó un adeudo que nadie pagó por un millón 251 mil 859 pesos a la empresa Mayodan Comercial Poblana.
Entre los gastos se encuentra la movilización de 25 camionetas tipo Suburban, 22 camiones Mercedes Benz tipo Sprinter, además de dos mil sillas color negro, dos mil 500 vallas y 200 fundas para vallas.
EL INFORTUNIO
Tras el deceso del matrimonio, Eukid N, uno de los principales operadores del morenovallismo y señalado por operar una red de espionaje en el gobierno, fue aprehendido en marzo de 2020 por enriquecimiento ilícito, extorsión, amenazas y uso de recursos con procedencia ilícita.
También fue detenida Mercedes Aguilar, exsecretaria particular de Rafael Moreno Valle, vinculada a proceso por el delito de abuso de autoridad. La exfuncionaria era “aviadora” en la Secretaría de Educación Pública (SEP), según trascendió.
En tanto panistas como Jorge Aguilar Chedraui y Pablo Rodríguez Regordosa perdieron peso político, otros enfrentan denuncias por presunta falsificación de documentos para obtener títulos: Roberto Ruiz Esparza y Franco Rodríguez.
Los que sobrevivieron, prefirieron buscar suerte en otros partidos. Tal es el caso de Marcelo García Almaguer quien se separó del PAN, fue diputado independiente y posteriormente regresó al blanquiazul.
Está el caso de Gerardo Islas, diputado de Nueva Alianza y posteriormente dirigente nacional de Fuerza Por México, partido que perdió su registro tras la debacle del 6 de junio.
Con la unción de Augusta Díaz de Rivera en la dirigencia estatal del partido se perdió el rastro del morenovallismo y el yunque se hace de la posición junto a Eduardo Rivera Pérez, quien fue electo presidente municipal de Puebla.
La llegada del gobernador Miguel Barbosa Huerta permitió destapar la cloaca de la corrupción en los proyectos del gobierno panistas que generaron altos costos de endeudamiento como el tren turístico y el Museo Internacional Barroco (MIB), de este último se pagan 35 millones de pesos mensuales.
El mandatario dio a conocer que se entregaron notarías de manera irregular y el uso de 24 empresas fantasma durante el gobierno de Tony Gali y Moreno Valle, a través del Comité Administrador Poblano para la Construcción de Espacios Educativos (Capcee) y la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento del Estado de Puebla (Ceaspue).
También se dieron a conocer anomalías en torno a la creación y operación de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA), Teleférico, el estadio Cuauhtémoc y la donación de terrenos a AUDI en San José Chiapa.
