En un ambiente de unidad reflejado en el lema “¡Todos somos BUAP!”, finalizaron las mesas de diálogo entre estudiantes y autoridades de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP). Durante las sesiones, se alcanzaron acuerdos en los 10 puntos del pliego petitorio, lo que representa un paso clave para la resolución del paro estudiantil que ha afectado a la institución.
Sin embargo, aún queda un tema pendiente: la entrega de Ciudad Universitaria (CU). De acuerdo con un comunicado oficial de la Comisión Institucional de Diálogo, la universidad informó que el día de mañana, domingo 30 de marzo a la 1:00 p.m., estarán en CU para recibir las instalaciones.
El comunicado destaca que el diálogo abierto permitió construir acuerdos en un ambiente de respeto y apertura, garantizando el flujo de ideas entre todas las partes. Asimismo, la BUAP reconoció el valor de la participación estudiantil, que fue clave para llegar a estos consensos.
Además, se anunció que el próximo lunes 31 de marzo se reanudarán las clases y actividades presenciales en Ciudad Universitaria, Ciudad Universitaria 2 y en las Facultades de Artes y ARPA. También se informó que continuarán las mesas de trabajo en las Facultades de Filosofía y Letras, Psicología, Lenguas y Físico Matemáticas.
Las mesas de trabajo abordaron temas clave como la mejora en la infraestructura educativa, actualización de planes de estudio, medidas contra el acoso y la violencia de género, y la creación de centros estudiantiles. Con estos acuerdos, se espera que las actividades académicas puedan reanudarse en los próximos días y que la convocatoria de admisión 2025 sea publicada sin más retrasos, beneficiando a más de 90 mil aspirantes.
Desde la BUAP enfatizaron que volver a las aulas no significa el fin del diálogo, sino la continuidad del trabajo colectivo para transformar la universidad. En ese sentido, hicieron un llamado a la comunidad estudiantil para seguir participando en la construcción de propuestas de mejora y fortalecer la corresponsabilidad entre autoridades y alumnos.
Este avance marca una etapa decisiva para la normalización de las actividades en la BUAP, con la expectativa de que la comunidad universitaria recupere sus espacios y continúe con sus actividades en un ambiente de estabilidad y respeto.