Pese a la inconformidad que desató la instalación de parquímetros en el Centro Histórico, el Ayuntamiento de Puebla abrió un nuevo frente de guerra en la Central de Abasto, en donde pretende imponer esta medida recaudatoria, lo cual ya generó las primeras inconformidades de los bodegueros y comerciantes.
El Ayuntamiento al mando de Adán Domínguez Sánchez, busca que la empresa que opere el servicio de estacionamiento sea Parkimóvil, cuyos socios son integrantes de la Organización Nacional del Yunque, grupo al que pertenece el exedil Eduardo Rivera Pérez.
“Di no a la instalación de plumas para acceder a la Central de Abasto que pretende el ayuntamiento, que se nos informe a todos del proyecto, atentamente la Central de Abasto”, se lee en una pancarta instalada en el acceso de este recinto.
Según expresa el anuncio, los comerciantes solicitan que se tomen en cuenta sus necesidades y la viabilidad del proyecto de colocación de plumas, en razón de que la Central de Abastos no cuenta con un espacio delimitado para implementar el sistema de parquímetros.
Esta medida, a decir de los inconformes, afectaría directamente a las ganancias de diversas agrupaciones comerciales que operan en este inmueble: las flores, la herradura, subasta chica, la primera subasta, el canal, las cajas, así como tianguis de ropa, bodegueros y otras áreas que ahora deberán pagar para ingresar a sus áreas de venta.
Desde el año pasado, este proyecto ya se había puesto en análisis, aunque hasta ahora se sabe que el Ayuntamiento busca imponer a Parkimóvil como la empresa proveedora. La justificación es que la colocación de plumas de acceso disminuiría la incidencia delictiva en la zona.
No obstante, la disidencia de los comerciantes se suma a la inconformidad de vecinos del Centro Histórico, quienes, tras la implementación de este servicio de estacionamiento rotativo, criticaron fallas en la operación el sistema como poca o nula señalética sobre la modalidad de pago, cobros excesivos y multas que tenían como intención establecer una medida recaudatoria para las arcas municipales.
Durante 2023, el gobierno municipal logró recaudar 18 millones 312 mil pesos por la operación de la plataforma de parquímetros, sin contabilizar las multas generadas a partir del mal uso de los cajones de estacionamiento.
Por otro lado, tan solo en lo que va de 2024, de acuerdo con Datos Abiertos del Ayuntamiento de Puebla, ya se han recaudado casi 3 millones de pesos por el concepto de pago de estacionamiento en el primer cuadro de la ciudad, que se suman a otros 2 millones 304 mil pesos de multas por no usar el sistema correctamente en enero, según reflejan los Estados Financieros presentados hace unas semanas.
En octubre del año pasado, la operación de los parquímetros en el Centro Histórico sufrió un revés, luego de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declaró inconstitucional una disposición de la Ley de Ingresos del municipio de Puebla que establecía el mecanismo de cobro de los parquímetros.
La revisión de esta ley se llevó a cabo como resultado de un recurso de apelación presentado por la Comisión de Derechos Humanos de Puebla, que cuestionó el artículo 57, fracción XI de la Ley. Este artículo establecía una tarifa de 10 pesos por la ocupación de espacios para estacionamiento de vehículos, con cobro a través de dispositivos digitales y comercios.
Sin embargo, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinó que el artículo carecía de claridad en cuanto a la temporalidad de las tarifas, lo que generaba incertidumbre para los usuarios, ya que esta información sólo se especificaba en un reglamento.
Previo a esto, durante los 16 meses que operó, la empresa Parkimovil recaudó 3.1 millones de pesos y su única aportación fue el préstamo de su plataforma, incrementado sus ganancias exponencialmente hasta en 944 por ciento.
No obstante, el municipio presentó una enmienda a la Ley de Ingresos para poder continuar cobrando por el sistema, lo que fue avalado por el Congreso de Puebla en el mismo mes.
Los parquímetros continúan siendo un punto de conflicto en la ciudad, toda vez que actualmente la CDH mantiene un segundo recurso de apelación contra la operación de este sistema, mismo que continúa en análisis en la SCJN.