El gobierno de Puebla, a cargo del gobernador Alejandro Armenta Mier, canceló la deuda millonaria heredada del morenovallismo por la construcción del Museo Internacional Barroco, que significaba un gasto anual de 523 millones de pesos hasta el año 2039.
Esta obra, iniciada bajo un contrato de Asociación Público-Privada (APP), era considerada “leonina” por el actual mandatario, ya que mantenía una deuda oculta y no otorgaba propiedad estatal del recinto.
El Congreso del Estado dio cuenta oficial de la terminación anticipada del contrato, a través de un oficio firmado por la secretaria de Cultura, Alejandra Pacheco Mex, la titular de Museos Puebla, Josefina Farfán Ortega, y el director jurídico Jesús Vázquez Viveros.
“Mediante resolución administrativa debidamente fundada y motivada se ha determinado la terminación anticipada del contrato de Asociación Público-Privada para el desarrollo, equipamiento y operación del Museo Internacional Barroco”, indica el documento.
El gobernador Armenta declaró que esta decisión representa “la obra financiera más importante” de su sexenio. En enero de este año, había anunciado la reducción de la deuda del museo de 7 mil millones a 2 mil millones de pesos tras reuniones con empresarios del proyecto.
Posterior al anuncio, Armenta aseguró que la cancelación permitirá mejorar la calidad crediticia del estado y liberar recursos públicos para futuras administraciones.
“Es un beneficio para el gobierno que encabezo, pero es pensando en el futuro, en las próximas generaciones. Es cerrar una etapa oscura en Puebla. El Museo Barroco ahora sí va a ser de los poblanos”, sentenció el mandatario.
El documento fue turnado a la Comisión de Presupuesto y Crédito Público del Congreso de Puebla, y forma parte de la auditoría instruida por Armenta a las obras del sexenio de Rafael Moreno Valle.
