El presidente Andrés Manuel López Obrador cumple su segunda visita a Puebla en lo que va de este año, la primera fue en enero cuando visitó Tepeaca, tierra natal del gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina. Esta vez el originario de Macuspana, Tabasco, encabezará una gira de dos días en el estado.
La tarde de este domingo 18 de febrero hizo su primera parada en el territorio poblano y este lunes estará en Oriental, desde donde encabezará su tradicional conferencia mañanera y, posteriormente, a las 10:00 horas, inaugurará el complejo de la Industria Militar.
La visita de López Obrador se da en un contexto matizado por la efervescencia electoral en la entidad. La víspera el empresario José Chedraui Budib fue elegido como precandidato de Morena a la alcaldía de la capital poblana, a pesar de que el sector duro y “puro” del obradorismo lo rechazaba, incluso durante la visita del mandatario hubo algunos brotes de ese rechazo que pasaron de largo.
Por el contrario, en su mensaje, el Ejecutivo federal aprovechó para elogiar a Sergio Salomón Céspedes, el líder político del movimiento en el estado, y quien desde un principio ofreció piso parejo y un juego limpio a todos los aspirantes en el estado, lo que vino a acallar las voces sobre una supuesta imposición de perfiles externos al partido.
“Es un extraordinario gobernador, no crean que le estoy haciendo la barba, es muy bueno, pero muy bueno, muchas felicidades porque tienen a un extraordinario gobernador”, expresó López Obrador, y tras sus dichos el público vitoreó a Céspedes Peregrina al grito de “¡Gobernador!, ¡Gobernador!”.
El Ejecutivo federal reiteró que seguirá apoyando al mandatario poblano en los siete meses que le restan al frente de la administración pública y seguirá visitando Puebla, pues este lunes encabezará una visita al municipio de Oriental.
“Y ustedes, la verdad, que son virtuosos porque tienen muy buena suerte”, agregó López Obrador antes de también exaltar al arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinoza, quien fue invitado a la entrega obras de reconstrucción del patrimonio de Puebla, en su mayoría templos religiosos.
El presidente resaltó que el jerarca “es de lo mejor”, y aseguró que es “un auténtico cristiano”, de los que aplica la doctrina de Jesús, quien siempre luchó por los desposeídos y por los pobres, añadió.
“Por eso lo seguían, lo espiaban, lo llamaban ‘alborotador del pueblo’, y por eso lo crucificaron, pero si somos buenos cristianos tenemos que estar pensando siempre en el prójimo, en ayudar a todos y darle preferencia a los más necesitados”, dijo.
ENTREGARÁ LA ESTAFETA A UNA MUJER QUE SE LLAMA JUSTICIA
De paso, Andrés Manuel López Obrador volvió a referir que en el país “está garantizada la continuidad” de la transformación en México, por lo que en septiembre pasará la estafeta a “una mujer que se llama justicia”, esto último en clara alusión a Claudia Sheinbaum Pardo, candidata de Morena a la presidencia.
“Está garantizado el relevo. Lo dije ayer, lo dije en la costa de Guerrero, que voy a entregar la banda a finales de septiembre a una mujer que se llama justicia, y voy a estar muy tranquilo por eso, porque va a continuar la transformación”, puntualizó.
Al anunciar las razones por las que dejará la presidencia “contento”, el mandatario federal indicó que la primera es porque se asume como maderista por lo que todos deben respetar el principio de sufragio efectivo no reelección.
Además de estar garantizada la continuidad, aseguró, la tercera y última de sus razones porque expresó que no “hay que tenerle mucho apego ni al poder ni al dinero” porque “esa no es la felicidad, la felicidad es estar bien con uno mismo, estar bien con nuestra consciencia y estar bien con el prójimo, esa es la verdadera felicidad”, pronunció.
López Obrador reiteró su agradecimiento con Puebla, pues en su lucha por la transformación del país recorrió todos los municipios del estado, asegurando que conoce los 217 que lo conforman.
“Y me consta que hay en Puebla mucha cultura en sus comunidades, que gracias a esas culturas hemos podido enfrentar todas las calamidades: pandemias, temblores, hambrunas, malos gobiernos, corrupción. Y por esas tradiciones, costumbres, por nuestras culturas, por el México profundo, hemos podido siempre levantar a Puebla y levantar a México”, expuso.