El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, anunció un nuevo modelo de entrega de uniformes escolares que alternará con chalecos cada año, con el objetivo de ahorrar cerca de 300 millones de pesos que serán destinados a mejorar la infraestructura educativa del estado.
Con este esquema, un año se entregarán uniformes y al siguiente, chalecos escolares, lo cual permitirá canalizar recursos públicos a la rehabilitación de baños, instalación de paneles solares, construcción de aulas y techados escolares. La propuesta tiene como eje la eficiencia financiera con un enfoque social.
“Eso significa que estamos combatiendo el moche, la milpa y las comisiones de fondo”, enfatizó Armenta, al tiempo que lanzó un mensaje claro contra viejas prácticas de corrupción en las compras públicas.
“Yo no vine a agradarle a los que estaban acostumbrados al saqueo a partir del gobierno, yo vine a servirle al pueblo y eso vamos a hacer”, declaró con firmeza, marcando una diferencia con administraciones anteriores.
La iniciativa forma parte de una estrategia de austeridad y reinversión social que busca maximizar el impacto del gasto público, fortaleciendo el sistema educativo con infraestructura digna y eficiente para niños y niñas en Puebla.