El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, dio luz verde a que el Congreso local incorpore ajustes a la polémica Ley del Ciberasedio, y se mostró a favor de que funcionarios públicos sean expresamente excluidos de cualquier posible protección contemplada en la normativa.
Luego de varios días de debate y cuestionamientos, el mandatario consideró válida la sugerencia planteada por la presidenta Claudia Sheinbaum, quien por la mañana rechazó que esta reforma busque censurar opiniones críticas, como lo han planteado algunos actores de oposición.
“Yo creo que el resultado de los foros, de las reuniones que están teniendo va a llevar a eso (excluir a funcionarios públicos) y la presidenta nos da una opción muy importante, que yo estoy seguro que los legisladores lo van a considerar”, sostuvo Armenta.
En ese sentido, reiteró que la ley está pensada para hacer frente a conductas digitales que trascienden la libertad de expresión, como ataques cibernéticos dirigidos a negocios y plataformas empresariales, así como casos graves de hostigamiento en redes sociales contra menores de edad.
“Lo importante es que nadie se ponga el saco, hablamos de ciberdelincuentes, no de medios de comunicación, son gente que se dedica a proteger libertades y generar comunicación con la población”, declaró, buscando disipar las dudas sobre el enfoque de la reforma.
El artículo 480 del Código Penal del estado es el que establece el tipo penal de ciberasedio, y actualmente se encuentra en proceso de análisis por parte de diputados locales. Se prevé que se le agregue una disposición específica que aclare que ninguna figura pública podrá usar esta ley como defensa frente a críticas legítimas.
Versiones periodísticas apuntan que este cambio será uno de los más relevantes que surjan de los foros de socialización de la ley, los cuales se están realizando para recoger inquietudes ciudadanas y perfeccionar el contenido legal.
