El Gobierno de Ecuador emitió una alerta máxima tras informes de inteligencia que advierten sobre un presunto plan para atentar contra el presidente Daniel Noboa, mediante el traslado de sicarios desde México y otros países.
Según la información oficial, las amenazas incluyen planes de magnicidio, ataques terroristas y manifestaciones violentas, presuntamente orquestadas por estructuras criminales vinculadas a sectores políticos derrotados en las últimas elecciones.
Aunque no se han presentado pruebas públicas, el Gobierno ha reforzado la seguridad presidencial y activado protocolos de protección para neutralizar cualquier amenaza.
La oposición, representada por la excandidata Luisa González, cuestionó la veracidad de estas amenazas, acusando al Gobierno de utilizarlas para reprimir la disidencia y justificar la militarización.
Este anuncio ocurre en un contexto de alta tensión política y social en Ecuador, donde Noboa mantiene una postura firme contra el crimen organizado, declarando al país en conflicto armado interno y solicitando apoyo internacional.
