Al estilo de la exalcaldesa Claudia Rivera Vivanco, el edil panista Eduardo Rivera Pérez, así como su secretaria de Medio Ambiente, Myriam Arabian Couttoulenc, salieron a repartir culpas tras el fallecimiento del niño Santiago Trejo, quien falleció el pasado lunes debido a la caída de un árbol sobre el corredor 5 de Mayo y la calle 2 Norte.
A pesar de que el Ayuntamiento de Puebla no revisó la condición de los árboles que se encuentran en el primer cuadro de la ciudad, no hubo funcionarios sancionados por las omisiones o por posibles casos de negligencia, tampoco algún anuncio sobre iniciar desde la Contraloría una investigación para deslindar responsabilidades, como lo solicitó el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta.
Por el contrario, la respuesta del munícipe ante esta problemática, que ya cobró la vida de un menor de 12 años y que dejó a su madre temporalmente en silla de ruedas y con diversas lesiones, fue la de responsabilizar al cambio climático por el incidente y a los vientos de hasta 50 kilómetros por hora que se han registrado en esta temporada.
Durante la mañana de ayer, el edil panista señaló que trombas como la de este lunes no sólo han ocurrido en la ciudad de Puebla, sino en otros sitios como Culiacán y Chihuahua que también han sido afectadas por los cambios ambientales en las últimas semanas.
“Como ustedes han visto, ayer yo veía algunos noticieros nacionales: el desastre que está causando el cambio climático, las lluvias atípicas. Ayer veía en Culiacán, en Chihuahua y así ha venido sucediendo en el transcurso de las últimas semanas, de inundaciones fuera de toda proporción. No ha llegado afortunadamente este tipo de situaciones a nuestra ciudad, lamentablemente lo de antier tuvo la pérdida del pequeño en nuestra ciudad”, sostuvo.
La secretaria de Medio Ambiente municipal no se quedó atrás con las justificaciones tras las críticas de activistas y colectivos que reprocharon que la solución ante el deceso de un menor haya sido la de cortar cinco árboles del Centro Histórico que supuestamente identificaron como débiles tras las lluvias del pasado lunes.
Según Couttoulenc, la decisión de cortar los árboles se tomó tras recibir la recomendación de especialistas del Instituto Nacional Forestal, así como de la Secretaría de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial (SMADSOT) del gobierno estatal.
No obstante, la mañana de este miércoles, el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, señaló todo lo contrario: habrá investigaciones para verificar si existió negligencia por parte del Ayuntamiento de Puebla que provocara la caída del árbol sobre la familia.
“Estén tranquilos, la decisión que se está tomando no es una decisión unilateral, se ha consultado con diferentes especialistas, sobre todo del Instituto Nacional Forestal que nos está asesorando permanentemente, el director Benjamín, el doctor Emmanuel, biólogos, también estuvieron presentes especialistas del gobierno del estado, quien avaló también la decisión”, apuntó Couttoulenc.
EL SEPELIO DE SANTIAGO
Santiago era sólo un niño de 12 años que estudiaba la secundaria. Este lunes cursaba su primer día de clases y al salir acudió a la caseta de periódicos que atendía su mamá, sobre el corredor 5 de Mayo y la calle 2 Norte, sin imaginar que ese mismo día perdería la vida a causa de la caída de un árbol.
Al medio día de este miércoles 31 de agosto, Santiago fue velado en la funeraria Latinoamérica, ubicada sobre el bulevar Luis Sánchez Pontón, en la ciudad de Puebla. Con él lo acompañaron familiares más cercanos a Teresa, su madre.
En el sitio no sólo acudieron para brindar el pésame, sino que también pidieron al Ayuntamiento de Puebla la reparación del daño al reinstalar la caseta de periódicos que quedó hecha trizas tras el accidente.
“Ella ya tenía bastantes años, es una caseta histórica, literal más de 50 años y era el único recurso que ella tenía. No sólo eso, también perdió otras cosas de valor y pues ojalá que muy independientemente de que a ella le estén apoyando como así lo dijo Eduardo Rivera, ojalá le puedan recuperar la caseta, son cosas materiales que van y vienen y cuestan al final del día y con las que ella se mantenía”, dijo una de las tías de Santiago.
En punto de las 14:00 horas, se trasladaron al sepelio que tuvo lugar en el Panteón Francés, ubicado sobre la avenida 11 Sur. Entre música, decenas de allegados a Santiago alzaron alabanzas y rezos para despedirlo.
Allí se encontraba Teresa, madre de Santiago, quien acudió con collarín, una venda que le cubría parte del rostro y en silla de ruedas tras haber sido dada de alta del hospital unas horas antes.
En medio de llanto y notablemente con lesiones físicas, se despidió de su hijo sosteniendo una fotografía suya. Compañeros de escuela de Santiago, voceadores del Centro Histórico y la familia más cercana lo despidieron con gran cariño, soltando globos blancos al aire y con decenas de flores.
