Incumplimiento de acuerdos, hostigamiento y el envío de grupos de choque, fueron los señalamientos que hicieron integrantes de la Unión Popular de Vendedores Ambulantes (UPVA) 28 de octubre, en contra de la Secretaría de Gobernación municipal a cargo de Jorge Cruz Lepe, a quien señalaron por prometerles espacios para comercializar sus productos frente a la Central de Abasto, para luego retirarlos por la fuerza sin ninguna explicación.
Rubén Sarabia, líder de la agrupación comercial 28 de octubre, denunció que sus agremiados, quienes estaban instalados en el interior de El Herrial -sitio que no forma parte de la Central de Abastos municipal-, fueron reubicados en la calle 108 Poniente para comercializar sus productos, al existir sobresaturación en el sitio donde trabajaban.
La promesa fue que en el nuevo espacio podrían disfrutar del pago de una cuota de renta a un menor costo, además de que estarían exentos de multas como las que les eran impuestas por su anterior líder comercial.
Su reubicación ocurrió con la venia del secretario de Gobernación municipal, quien permitió que más de 60 comerciantes se trasladaran al espacio de la 108 Poniente de manera provisional, mientras la Comuna alistaba un nuevo espacio para que ofrecieran sus artículos sobre la calle 104 Poniente.
Los integrantes de la 28 de Octubre aceptaron la invitación debido a que la líder del tianguis privado El Herrial, Alejandra Luna, había cometido una serie de vejaciones contra los locatarios de esa agrupación, a fin de que ya no tuvieran representación.
Multas de mil pesos por colocar una sombrilla frente a sus negocios o por no hacer limpieza, la negativa de tener acceso al agua potable, amenazas e intimidaciones, eran parte de las agresiones cometidas por parte de Alejandra Luna en detrimento de los comerciantes de la 28 de Octubre, motivo por el que decidieron apartarse de El Herrial.
La sorpresa fue que tan pronto se colocaron en el nuevo espacio, fueron retirados por medio de granaderos, la policía municipal e inspectores de Vía Pública de la Segom, esto luego de que Cruz Lepe no realizó consensos con los bodegueros de la Central de Abasto.
Ismael Serrano, integrante de la agrupación, declaró que fue personal de la Secretaría de Gobernación municipal la que azuzó a los bodegueros de la Central de Abasto, especialmente al secretario general José Huerta y a la mesa directiva de Alejandra Luna, para contratar a grupos de choque que sacaran a punta de golpes a la 28 de Octubre del área que se les había designado para laborar sobre la avenida 108 Poniente.
“Los compañeros el día 12 de marzo se vieron en la necesidad de salirse para ejercer su derecho al trabajo; fueron 14 compañeros al inicio, pero al final llegan a ser más de 60 que se llegaban a instalar sobre la avenida 108 Poniente por todos los maltratos que les hizo Alejandra Luna. Incluso al Ayuntamiento se les planteó todo este tema para que se firmara un acuerdo. Sin embargo, el jueves contestaron con la agresión”, declaró.
Fue entonces que, al no concretar el cometido de retirarlos, los líderes de la Central de Abasto enviaron a sus agremiados para cerrar la autopista México-Puebla en sus dos sentidos, lo que provocó que el gobierno del estado presentara denuncias penales contra ambas organizaciones por el cierre de vías de comunicación.
La problemática generó durante varios días una fuerte fricción entre ambas organizaciones comerciales y un clima de incertidumbre, en el que el sitio fue resguardado por policías municipales a fin de evitar un problema mayor.
Tonatiuh Sarabia, uno de los líderes de la 28 de Octubre, narró que del jueves 1 al sábado 3 de diciembre hubo presencia de uniformados en las inmediaciones de la Central de Abasto y tianguis de El Herrial, así como una fuerte cantidad de patrullas a fin de inhibir la instalación de los ambulantes.
Debido al conflicto, la organización comercial exige el reingreso de 16 de sus agremiados a la Central de Abasto privada El Herrial, en tanto que entre 12 o 14 de sus otros compañeros se les permita instalarse de forma provisional sobre la calle 108 Poniente, mientras se les adecúa el espacio que Jorge Cruz Lepe les prometió sobre la calle 104 Poniente.
