La presidenta Claudia Sheinbaum ratificó este martes que su propuesta de reforma electoral se someterá a una consulta nacional amplia y a una discusión abierta e incluyente, en la que podrán participar representantes de la oposición, académicos, sociedad civil y expresidentes del Instituto Nacional Electoral (INE).
“Vamos a hacer una consulta amplia y va a haber una amplia discusión”, señaló la mandataria en su conferencia matutina, al referirse al proceso que acompañará los trabajos de la recién creada Comisión Presidencial para la Reforma Electoral, encabezada por Pablo Gómez.
Sheinbaum explicó que no se tratará únicamente de un proceso técnico-jurídico, sino que será acompañado por foros públicos, parlamentos abiertos y una encuesta nacional para recoger las opiniones de la ciudadanía sobre temas clave como el financiamiento a los partidos políticos y la representación proporcional.
“Vamos a hacer una encuesta para ver qué opina el pueblo… no defendiendo a un partido u otro, sino con el objetivo de reducir los recursos al sistema electoral en su conjunto”, declaró.
La presidenta también reiteró que “se va a escuchar a todos y se les va a tomar en cuenta” durante el proceso. Aclaró que no se consultará solo a los expertos, sino a la población en general:
“Se va a escuchar al pueblo, a la gente, porque sí, México es un país más democrático que el del 2006, es más democrático que el del 2012, la gente se siente representada”, sentenció.
En ese contexto, recordó que en 2006, cuando Luis Carlos Ugalde era presidente del entonces Instituto Federal Electoral (IFE), solo se reabrió el 8% de las casillas pese a la exigencia ciudadana de un recuento total.
“Se negaron a abrir las casillas, sólo abrieron el 8%”, criticó.
Además, Sheinbaum confirmó que serán convocados expresidentes del INE como José Woldenberg, Leonardo Valdés y el propio Ugalde, así como partidos de oposición, quienes podrán aportar propuestas y observaciones durante los diálogos.
Sheinbaum subrayó que el objetivo es construir una reforma de fondo que modernice el sistema electoral, promueva la austeridad y fortalezca la democracia, sin excluir a nadie del diálogo.
La reforma electoral es una de las prioridades legislativas del nuevo gobierno. El pasado 4 de agosto, Sheinbaum publicó un decreto para instalar una comisión presidencial que operará hasta septiembre de 2030. La presidenta ha prometido que el proceso será transparente y democrático.