El Senado de la República aprobó este viernes una reforma que convierte la CURP en documento oficial de identidad con datos biométricos obligatorios, lo que ha generado preocupación entre colectivos de derechos humanosy legisladores de oposición.
Con 69 votos a favor, 28 en contra y 5 abstenciones, la Cámara Alta avaló cambios a la Ley General de Población y otras normativas relacionadas con la búsqueda de personas desaparecidas.
La nueva CURP biométrica incluirá huellas dactilares, fotografía y otros datos personales sensibles, y estará vinculada a la aplicación digital del gobierno federal, “Llave MX”.
El dictamen establece que esta CURP será exigible para trámites públicos y privados, y funcionará como documento nacional de identidad.
Según legisladores oficialistas, la medida busca fortalecer la identificación de personas desaparecidas y facilitar el cruce de información con el Banco Nacional de Datos Forenses y el Registro Nacional de Personas Desaparecidas.
No obstante, senadores del PAN y PRI, así como organizaciones civiles, alertaron sobre un posible sistema de vigilancia masiva sin controles judiciales. Afirmaron que el Estado podría acceder a datos biométricos sin orden de autoridad competente ni notificación previa.
“El gobierno está normalizando el espionaje institucional y el uso de tecnologías sin garantías”, denunció la senadora Xóchitl Gálvez.
El dictamen fue turnado a la Cámara de Diputados, que deberá debatirlo antes del 2 de julio. En caso de aprobación, la implementación será gradual y podría comenzar este mismo año.